Publicado Diario de Teruel 29/03/2021
¿Es ilegal vivir en un chalé? No. ¿Es ilegal ser secretario general de un partido y vicepresidente del Gobierno? No. ¿Es ilegal ser vicepresidente del Gobierno y tu esposa ministra de ese mismo Gobierno? No. ¿Es ilegal que la amiga y compañera de estudios de tu esposa ministra sea también ministra? No ¿Es ilegal que el marido de la amiga, compañera de estudios y ministra de tu esposa ministra sea asesor del grupo parlamentario en el Congreso del que tú, tu esposa y la suya sois diputados? No. ¿Es ilegal decir que se limitan los mandatos y los salarios de los cargos de tu partido y al poco tiempo cambiar de opinión? No. ¿Es ilegal castigar los oídos de los ciudadanos con la casta, los de arriba y los de abajo, el centro del tablero, el régimen del 78 y el poder de los círculos, y en poco tiempo olvidarse de todo? No. Entonces, si todo lo anterior es legal, ¿por qué muchos ciudadanos critican tanto a Podemos y por qué cada vez tienen menos apoyo electoral? Por la incoherencia. Porque una cosa es predicar y otra dar trigo. Por aquello de haz lo que yo diga, no lo que yo haga. Porque obras son amores, que no buenas razones. Se puede vivir en un chalé, pero no es decente hacerlo cuando te has hinchado de criticar a “los políticos que viven en chalés” y defendías que los políticos deben vivir en un sitio en el que sepan “lo que es coger el transporte público”. Es legal que los dos miembros de un matrimonio sean ministro y ministra en un mismo Gobierno y que un amigo o una amiga de la Universidad sea ministro o ministra en ese mismo Gobierno, pero no queda bien si tú criticabas a Ana Botella de ser alcaldesa de Madrid por ser “esposa de, nombrada por, sin preparación”. Es ejercer la libertad de expresión cuando pides el indulto de Pablo Hasél porque nadie “debe ser condenado por sus opiniones”, aunque diga “que alguien clave un piolet en la cabeza de José Bono”, pero denuncias en los tribunales cuando escriben un poema satírico en el que se dice que “Irene Montero, por una inquieta bragueta, va con Tania al gallinero". También es libertad de expresión cuando un Pablo de Podemos dice que a una periodista “la azotaría hasta sangrar” y el otro Pablo de Podemos, Echenique, dice que los maltratadores de mujeres y los abusadores sexuales votan a la derecha. Seguramente se lo habrá dicho Dominga a su regreso de Francia.
Evaristo Torres Olivas
1 comentario:
Si tienes la lengua muy larga, la hemeroteca te mata. Estos criticaban lo que criticaban por que no estaban ellos. En cuanto se pusieron en el lugar de los otros han hecho lo mismo o más.
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