Ya es la segunda vez que escucho o leo las tontadas de nuestro presidente Iglesias. No es que le siga mucho. No me gusta perder el tiempo escuchando a los sinsustancia. Hace un tiempo, en un programa de radio que se hizo desde Teruel, don Marcelino defendió que la subida del IVA era una medida muy progresista y socialista, mucho más que modificar el impuesto sobre la renta. Venía a decir el sagaz economista sin título que como los ricos consumen más, también pagan más. Ahora nos vuelve a sorprender contando que la reforma de las pensiones es también una medida progresista y socialista. Y lo ha vuelto a proclamar en Teruel. Parece que elige siempre a Teruel para soltar las tontadas más gordas. Me recuerda el señor Iglesias, y no sólo por el apellido, a esos católicos fundamentalistas que defienden a la Iglesia haga lo que haga. La fe del carbonero frente a los hechos y a la evidencia. O también el interés: saben que defienden lo indefendible pero prefieren hacer el canelo antes que perder la bicoca. A don Marcelino le ha costado mucho llegar desde la alcaldía de un pueblo que no llega a los cien habitantes, a número tres del PSOE; y no es cuestión de echarlo todo por la borda. Si hay que mentir, se miente. Si Zapatero le pide a Marcelino cualquier cosa, este responde con “lo que me eches, presidente, que para eso estamos”. Tiene razón Sandra Lezcano, una mujer en paro que afirma en una entrevista de Heraldo de Aragón: "Tener muchos estudios es un problema en las entrevistas de trabajo". Y añade más adelante que “en algunos sitios creen que por tener un título universitario puedo ser más conflictiva”. Así debieron pensar en el PSOE cuando ficharon a Marcelino. El que desconoce algo, se cree a pies juntillas lo que le cuentan los jefes. Los mejores empleados no son los más inteligentes ni los más capacitados sino los más dóciles y sumisos; los obedientes. Lo mismo que los mejores perros son aquellos que se humillan ante el amo que les da un hueso pero son capaces de saltar a la yugular de cualquiera a la mínima instrucción del señorito. Marcelino no quiere acabar como Sandra, una universitaria con dos carreras, cuyo último trabajo remunerado consistió en disfrazarse de Dora Exploradora durante cuatro días en Zaragoza. Sabe el de Bonansa que hay otras formas mucho más rentables de hacer el payaso.
Evaristo Torres Olivas
martes, 21 de diciembre de 2010
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3 comentarios:
Simplemente diré: Me gustó tu artículo; por claro, ameno y un punto chistoso.
ARB
Ójala los periodistas se ajustaran a la idea de periodismo que tiene ese argentino Verbitski. En estos tiempos, y siempre, eso es una utopía. Al que lo intente se le cerraran las puerta de casi todos los medios de comunicación que están en manos de empresas capitalistas y de la clase política.
Soy chocero también, y por ello me gusta que, de vez en cuando,emplees expresiones de nuestro habla o de nuestros antepasados. Me gustó el título de una de tus últimas entradas, al que añadiamos "y oro del que caga el toro".
Muy acertadas las reflexiones últimas sobre el partido ¿socialista? español y sobre Marcelí Iglesias. Sus actuaciones (su forma de estar,decir y actuar)no difieren mucho de otros políticos "menores" de su partido o del PP que "trabajan" en la Diputación P. o en la Comarca y que todos conocemos.
Saludos.
en cuatro dias sale Sr. Biel y da el golpe en la mesa se presenta para alcalde de teruel, y marcelino se le cae el castillo.
su socio echara leña la fuego y marcelino junto con yolanda y guillen a poner orden en teruel .
lo mejor esta por venir,
chao
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