“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

domingo, 23 de agosto de 2009

El político hinchable

En este periodo de crisis, nos dicen por todas partes que hay que tener ideas imaginativas, ser creativos, apostar por industrias de alto valor añadido, por las energías renovables, por aumentar la productividad. Frases hechas, mandamientos, consignas que los partidos reparten a sus sacerdotes, diáconos, sacristanes y monaguillos para que las voceen en las misas de los mítines, debates y otras representaciones y rituales en los que dan a conocer a la grey las buenas nuevas de su iglesia.
Como buen español, preocupado por el devenir de mi patria, quiero aportar una idea que va a revolucionar el mercado y que va a contribuir a ahorrar miles de euros a nuestras arcas públicas.
Si se repasa la cantidad de políticos que tenemos en las diversas instituciones, Parlamento europeo, nacional, autonómico, ayuntamientos, comarcas y lo que le cuestan al erario sus salarios, dietas, viajes, coches y otras muchas gangas y prebendas, uno se da cuenta de que ascienden a cifras astronómicas. También es fácilmente comprobable que de los miles de políticos que pululan por las instituciones, solamente una parte pequeña ejerce una labor productiva. El resto se limitan a labores de palmero, utillero y pulsador de botón en las votaciones. No exagero. Los lectores pueden consultar los diarios de sesiones y las actas de las instituciones.
Propongo que que se reduzca en un 90 por ciento el número de políticos y que sean sustituidos, en una primera fase, por muñecos hinchables que puedan aplaudir, abuchear y apretar botones. La inversión es mínima y el ahorro enorme. En una segunda fase, ni siquiera se precisarían muñecos. Bastaría con unos parlamentarios virtuales creados con las técnicas de los videojuegos. Unos simples proyectores láser en tres dimensiones darían un efecto de realismo impresionante. Les puedo asegurar que los resultados obtenidos con estas propuestas serían idénticos a los actuales. Con el dinero ahorrado, se podrían crear miles de puestos de trabajo de alto valor añadido, de alta productividad, en los que ni los muñecos ni el rayo láser pueden sustituir la presencia del ser humano.
Evaristo Torres Olivas. Villarquemado
DdT 23/8/2009

2 comentarios:

Trallero dijo...

Apoyo la propuesta: Expediente de Regulación de Empleo para políticos y cargos públicos de libre designación. De estos puestos existe una inflación desmesurada. Al día siguiente de hacer efectiva la propuesta estoy seguro de que nadie notaría nada. España seguiría funcionando por lo menos igual. Nadie los echaría de menos; ni siquiera en su puesto de trabajo preguntarían por ellos. Tal vez en algún restaurante notarán su ausencia.

Haría extensible esta propuesta a las televisiones públicas; resulta que ahora en España un mismo partido de futbol de “Champions League” lo retransmiten 16 o 17 cadenas autonómicas aparte de la “2” de TVE. Cada una con sus correspondiente comentaristas, deportista invitado, técnicos, etc, etc, y todo para comentar el mismo partido, el mismo. No valdría con una sola retransmisión para todos o al menos con 13 o 14 menos. Circunstancias como esta se repiten a diario en cualquier ámbito de la administración. El gasto es enorme, vano, inútil y, prescindible...

Anónimo dijo...

Buenas tardes Sr. Evaristo:
Estoy con ustedes, pero ¿qué hay que hacer? y ¿cuámdo empezamos?, por que por más que escribamos ustedes y yo, todo sigue igual, sino es peor.
¿qué tendríamos que hacer para tirar a todos estos politicos?.
En mi opinión, el primer paso para tirar un buen número sería, CAMBIAR LA LEY ELECTORAL. Todos estos partidos bisagra donde un voto vale como tres de los demas, perdón por la expresión, a la puta calle. Ya nos quitariamos de un plumazo, PNV, ERC, CIU, BNG, etc....que estos son el "cancer" de la democracia, y de paso subiria Izquierda Unida.

Una lectora.