Las habas cocidas y las ovejas negras son casos aislados

Cuando a los dirigentes del PP y del PSOE les preguntan por los casos de corrupción que carcomen los cimientos de sus partidos, todos sin excepción recurren a las mismas fórmulas: frases hechas y Bart Simpson. Entre las frases hechas destacan las que hablan de manzanas podridas, de casos aislados, ovejas negras, habas que cuecen en todas partes, la apertura de cajas de truenos y de los que estén libres de pecado que tiren la primera piedra. En cuanto al recurso a Bart Simpson, no dudan en copiar su “yo no he sido, nadie me ha visto hacerlo y no podéis probar nada”. Todas estas excusas infantiles no deberían colar cuando los casos aislados son legión, las manzanas podridas llenan el cesto, y las ovejas descarriadas, blancas o negras, se cuentan por docenas. Tras la reciente sentencia de los ERE en Andalucía, los dirigentes del PSOE, en lugar de dar la cara y decir que es una vergüenza que un partido con 140 años de historia no sea capaz de evitar tales abusos y comprometerse a adoptar medidas para evitar que se repitan, han vuelto a recurrir a las excusas de siempre. José Luis Ábalos, secretario de Organización y ministro de Fomento, con toda solemnidad ha declarado que “no es un caso del PSOE sino de antiguos responsables de la Junta de Andalucía”. La ministra de Educación y portavoz del Gobierno, con la misma solemnidad ha dicho que “el asunto de los ERE no afecta a este Gobierno y mucho menos al presidente del Gobierno en funciones”. Susana Díaz, expresidenta de Andalucía, para no apartarse del guion, también ha declarado que de todo el descontrol de los ERE «sí sé que no ha habido enriquecimiento de Manolo [Chaves] ni de Pepe [Griñán]” y que ella no ha sido, como Bart Simpson, porque ni siquiera estaba en la Junta. Finalmente, otro exministro y expresidente de Castilla-La Mancha, José Bono, se arriesga a "poner las dos manos en el fuego por Chaves y Griñán porque ninguno de los dos se ha llevado ni un euro, ni un sobre". En resumen, que como diría Gila, alguien ha robado algo y lo robado ha ido a parar a algún sitio. Y como no se sabe dónde está lo que se ha robado, no se puede devolver. El PSOE es, en definitiva, un partido muy decente, con alguna oveja negra, algún caso aislado y alguna manzana podrida. Más vale no abrir la caja de los truenos porque en todas partes cuecen habas, que se lo pregunten al PP, que, al contrario de Bart Simpson, sus dirigentes sí han sido, todo el mundo les ha visto hacerlo y podemos probarlo todo.

Evaristo Torres Olivas