“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

miércoles, 31 de mayo de 2017

Sobre el talento

El pasado día 30 de mayo, Chema López Juderías escribía una interesante columna en el Diario de Teruel titulada El talento. En ella daba su opinión sobre la marcha de Tomé Alfonso, director gerente de Motorland, por motivos salariales. Una ley reciente  de Aragón sobre el salario de los cargos públicos fija el tope del puesto que ocupa Alonso—equivalente a un director general— en 64.000 euros y él estaba cobrando más del doble, además de una serie de incentivos adicionales. Al señor López no le parece bien que se deje escapar a un profesional de la valía de Tomé Alonso. Concluye su columna con una afirmación rotunda: El talento se paga, y añade estas preguntas a las que intentaré contestar: ¿Cuánto cobra un mando intermedio de una empresa privada? ¿Cuánto debe cobrar un gerente de una instalación deportiva del prestigio de Motorland? ¿Cuántos directores generales del Gobierno de Aragón son prescindibles? Que el talento se paga no es siempre cierto. A veces, sí, y otras no. Y no todos los talentos se pagan igual. Es más, hay talentos a los que no se les paga nada. En un sistema capitalista, la retribución del talento depende de la escasez de ese talento y de los beneficios económicos que genera a su empresa. Ese es el motivo por el que el talento de Messi con una pelota se paga cientos de veces más que el de un prestigioso investigador sobre el amor en el siglo XIII. O que Marc Márquez cobre mucho más que el director gerente de un circuito de primera.  ¿Cuánto cobra un mando intermedio en una empresa privada? Primero habría que definir qué es un mando intermedio, después hacer una encuesta salarial  entre las empresas privadas. Sin temor a equivocarme, puedo asegurar que su salario está entre los 10.000 euros y los 100.000 euros. Y tampoco me equivoco si afirmo que el noventa y ocho por ciento cobra menos de los 64.000 euros que se ha puesto de tope para el sector público en Aragón. ¿Cuántos directores generales del Gobierno de Aragón son prescindibles? Ni lo sabe el señor López Juderías ni lo sé yo. Esa es una asignatura pendiente que tienen todas las administraciones en España: racionalizar las plantillas mediante la descripción, análisis y valoración de los puestos de trabajo. Sólo así se podrán encontrar los puestos prescindibles, los ocupantes que no dan palo al agua y también los que están con el agua al cuello.

Evaristo Torres Olivas

1 comentario:

Anónimo dijo...

Empecé a leer el artículo, pero estaba tan pésimamente redactado -el texto arranca con una insufrible sucesión de conjunciones y pronombres relativos- que lo dejé en el primer párrafo. Se agradece aquí el desbroce.