“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

lunes, 4 de mayo de 2015

Los profesionales

A pesar de que los políticos definen su actividad como “el noble arte de lo que representa el ejercicio de lo público”—Arturo Aliaga, Diario de Teruel del 30 de este mes— la verdad es que a mí me da la impresión de que a la política se han dedicado hasta ahora lo peor de cada casa, la gente con menos escrúpulos, menos preparación y menos vergüenza. Con notables excepciones, se podría afirmar que en política están los que no sirven para otra cosa, gente sin palabra, desmemoriados, sin escrúpulos, mentirosos compulsivos, que se ríen de los ciudadanos, personas sin honor ni dignidad. José Ramón Morro, por ejemplo. Pide que Manuel Blasco y Carmen Pobo  “abandonen su rol de políticos profesionales para adoptar el de políticos de verdad, y estén a la altura de los tiempos dimitiendo de sus cargos y renunciando a sus respectivas candidaturas a las Cortes de Aragón y al Ayuntamiento de Teruel”. Y todo por la decisión del Gobierno aragonés del  PP de conceder el grado de Magisterio a la Universidad católica, apostólica y romana de San Jorge. Razón no le falta a Morro. Pero don José Ramón solo ve con un ojo y solo piensa con medio cerebro. Si no estuviera cegado por el fanatismo partidista y la ambición de seguir viviendo del cuento, se habría percatado de que su partido también está plagado, infestado, contaminado y podrido de políticos profesionales que no están ni han estado a la altura de los tiempos y que no han renunciado a nada. Ejemplos, a espuertas. Guillén, Arrufat, Larred, Mayte Pérez, Javier Velasco. Todos estos, que igualan o superan a Pobo y Blasco, tanto en años de permanencia como en ineptitud, ni han dimitido ni dimitirán. Y motivos para ello, a puñados: desde los desmanes en Plaza, la modificación del artículo 135 de la Constitución, los ERE de Andalucía, las tarjetas de Bankia, la ruinosa gestión de algunas cajas de ahorro, la reforma laboral del Zapatero, el desastre del paro durante sus mandatos, la mierda de las lucecicas del Torico, la otra mierda de la plaza Domingo Gascón y cien más. El propio Morro debería renunciar a su puesto de candidato y dedicarse a sanear su partido antes de pretender gestionar el Ayuntamiento.

Evaristo Torres Olivas
 

Los profesionales y el noble arte que representa el ejercicio de lo público

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La Universidad San Jorge se creó bajo el mandato de Marcelino Iglesias (PSOE), con Alberto Larraz (PSOE) como consejero de Ciencia, Tecnología y Universidad.

Mucho morro es lo que hay.

Anónimo dijo...

Creo que los turolenses no deben votar al PPSOE, por lo que tu bien nos recuerdas. Además con Teruel siempre ha habido ese puntito de desprecio y de soberbia que, nuestros representantes no han querido o podido enfrentar adecuadamente. Al contrario, han sido la voz de su amo( nunca mejor dicho) en esta grandiosa democracia española, injusta,corrupta y ya decadente.
ARB