Esta es la primera columna de una serie que voy a dedicar a
las Bodas de Isabel. Todos los años por estas fechas Teruel vuelve al siglo
XIII (el resto del año no es que estemos mucho más adelantados). Se pretende
que todo sea de la Edad Media, salvo los sablazos que te pegan en los
chiringuitos y bares. Dicen los responsables del invento que el rigor y la seriedad son su norte, que
nada se deja al azar. Y efectivamente, en los tenderetes y puestos callejeros,
que no difieren mucho de los de la feria ganadera de Cedrillas o en la de la patata de Cella, por poner dos ejemplos
cercanos, venden chuminadas de plástico o calientamanos de gel. Tanto el
plástico como el gel son, como todo el mundo sabe, inventos del siglo XIII o
anteriores. Eso sí, la organización, la Fundación o quien dirija ese cotarro, exige
a los vendedores enfundarse un traje de los que se llevaban hace ocho siglos. Y
hablando de trajes, el pasado viernes nuestro alcalde dijo en una entrevista en
la radio que durante estos días los turolenses no se disfrazan sino que se
visten. Y para confirmarlo, el Diario de
Teruel publicaba el sábado una foto tomada en el balcón del Museo de Teruel en
la que aparecen nuestro alcalde, la gerente de la Fundación, el pregonero de
esta edición, Ángel Solaz y Francisco Bono, consejero de Economía del gobierno
de Rudi. El consejero viste traje de los que venden en Ferrán y corbata colorada, y encima una capa verde (don
Ángel también, pero dada su avanzada edad, puede hacer lo que le dé la gana).
La corbata, al igual que el gel y el plástico, también es un invento del siglo
XIII. No se trata de un anacronismo como el de los péplums en los que aparecía
un tío vestido de romano con lanza y reloj de pulsera, sino de algo mucho más innovador:
la fusión de estilos y épocas. Para el
próximo año, para no aburrir al personal con la misma historia, se podría
innovar y evitar la trágica muerte de Juan Diego e Isabel. Para ello, Diego
enviará a Isabel un whatsapp en el
que le anuncia que se dirige a Teruel, que tiene pasta y que vaya preparando
las invitaciones para el casorio. Ese texto, junto con algunos emoticones, proyectado en la pantalla
gigante de la plaza de El Torico conseguirá que tiemble el misterio, que seamos
un “referente de la Europa enamorada” como cuentan los que saben de estas
cosas.
Evaristo Torres Olivas
Bonita corbata roja de fusión luce el consejero Bono. Muy fashion.
No hay comentarios:
Publicar un comentario