Tan malo es no tener nada de qué escribir como tener tantos
frentes abiertos que uno no sabe adónde acudir. A mí me sucede lo segundo. Me
agobio pensando sobre qué tema escribir y me paralizo. Me pasa lo mismo que con
el chiste: Si tu casa se quemara, tu mujer con un fraile (o tu marido con una
monja) y en tu culo un avispero, ¿adónde acudirías primero? Yo no sé fijar
prioridades y me quedo parado. Pero todo esto va a cambiar. A partir de hoy voy
a publicar una columna diaria en el blog. Sé que no servirá de mucho y que
nadie va a temblar de miedo, pero a mí me ayuda a templar los nervios, aliviar
el comecome que me produce lo que sucede en este país de chorizos y sinvergüenzas
y evitar que me afilie al Partido de la Motosierra y la Radial. Y complacer a los cuatro amigos que me leen y
que durante estos meses en los que he dejado de escribir, me han animado a
seguir.
Mañana les daré mi opinión sobre la retirada de la política
de Javier Velasco. Treinta y dos años viviendo de la política. Y luego se
quejan de que los llamemos casta.
Evaristo Torres Olivas
5 comentarios:
Me alegro de que te encuentres bien. Salud
Gracias por estar de vuelta. Te echábamos de menos.
Bien!!!Enhorabuena por el regreso y que sea ya definitivo.
Te echaba de menos.
Que pena lo que está pasando con el jamón de teruel.Espero se solucione pronto, ya que está dañando la imagen de este producto tan excepcional.
Publicar un comentario