“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

miércoles, 4 de diciembre de 2013

Barrer para casa

Le llamaban el del buen rollito, con talante, buena persona, progresista, socialista, partidario de lo público, que entró en la política para servir, nunca para aprovecharse personalmente. Es cierto que muy listo, lo que se dice muy listo, no es. Experiencia, lo que se dice experiencia, no tenía mucha fuera de la política.  Seguro que la supliría con su bonhomía.  Pero resultó un fiasco: tal vez el peor presidente de la etapa democrática desde que estiró la pata Franco.
Ahora, tras un largo silencio durante el que ha estado hibernando y cobrando en el Consejo de Estado, reaparece para presentarnos su libro titulado El dilema. Nunca me han gustado los aprovechados que utilizan su paso por la política para  forrarse una vez que están fuera, escribiendo sus memorias y contando cosas que en su día ocultaron a la ciudadanía, a cambio de unos cuantos cientos de miles de euros que les suelta Planeta u otras editoriales. Don José Luis, el de la ceja, incluye en su libro la carta mancomunada que le enviaron el presidente del Banco Central Europeo y el gobernador del Banco de España y que  nuestro socialista de León negó—en sede parlamentaria— haber recibido. No sé si eso forma parte de los 130 años de honradez del PSOE. Al final va a resultar que Zapatero ni tiene tan buen talante, ni es tan buena persona, ni es tan progresista, ni socialista ni nada de nada. Un aprovechado más de los muchos que campean, como el Cid, por las tierras de España.
Es indignante escuchar a los políticos decir que no están en política para forrarse sino para servir, por vocación, pero lo cierto es que todos acaban mucho más ricos tras su paso por la política.  Que se lo pregunten a Felipe González, a Bono, a Aznar, y a otros muchos que por ser políticos de segunda o tercera, se conoce menos su enriquecimiento.
El buenazo de Zapatero ha utilizado un documento público para generar beneficios privados a él y a la editorial Planeta. Y no se le ocurre otra idea mejor que llevar a Toni Blair de telonero en la presentación de su libro. El mismo Blair, amigo de Aznar, que aparece en la foto de las Azores. Blair, el señor de la guerra y Zp, el señor del buen rollito. Amiguetes. Uno lleva a las tropas a la guerra y el otro las retira. Lleva y traer, todo es lo mismo.   Pero claro, una cosa es predicar y otra dar trigo. El de la ceja, el de a favor de la alegría, es uno más  que barre para casa y que piensa que su pariente más próximo es él mismo.

Evaristo Torres Olivas
Si Aznar es amigo de Blair y Blair es amigo de Zapatero, entonces ¿es Zapatero amigo de Aznar?

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Los amigos de mis amigos son mis amigos.

Anónimo dijo...

Seguro que algún totolaba compra el libro.

Anónimo dijo...

Yo empecé votando a UCD y cuando desapareció me pasé al PSOE y desde entonces siempre los he votado hasta que hace dos años por culpa de Zapatero mi hijo perdió el trabajo y se tuvo que ir a trabajar a Italia, y ya no pienso votar al PSOE nunca más en mi vida por mentirosos.

Anónimo dijo...

Pues si es "por mentirosos", ¿queda algún partido al que votar?