“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

miércoles, 2 de octubre de 2013

Repelús (Historias de Motorland 1)

Voy a escribir unas cuantas columnas sobre Motorland y sus protagonistas. La de hoy está dedicada a la reportera más dicharachera del Diario de Teruel, la delegada en el Bajo Aragón, Maribel Sancho Timoneda. Sus crónicas, reportajes, artículos y columnas son pésimos. Los peores del diario (que no destaca por su calidad literaria, ni tampoco por la no literaria). Para situar sus escritos en una escala comparativa, podríamos afirmar, sin equivocarnos, que se encuentran varios grados por debajo de una redacción de niños de Primaria. Veamos algunos ejemplos de su crónica del lunes, 30 de septiembre. Empecemos por el título: Cervezas, jamones y mucho sentido del humor en la pelousse[sic] de Motorland. Si se escriben palabras de otro idioma hay que asegurarse de hacerlo correctamente. Los diccionarios e Internet deberían ser las herramientas de trabajo de todo periodista, al igual que la paleta y el nivel lo son del albañil. Podría tratarse, dirán ustedes, de un despiste en el título, un error tipográfico.  No es así porque en el cuerpo de la información se repite tres veces  el mismo error . Es sencillamente desidia e ignorancia. Rediós, Maribel, si no sabes si se escribe arcén o “harcén”, pon cuneta y no pasarás por ignorante.
Más adelante, escribe frases incomprensibles como que “hay inventos que convierten un barril en cerveza”, y otras contradictorias como que “había jamón de Teruel para acompañar el pan”, para a continuación añadir que “lo mejor de la comida, un jamón (no se sabe si de Teruel)”. ¿En qué quedamos? No faltan tampoco las palabras y expresiones desgastadas, de tanto usarlas, como que el jamón hizo las delicias de todos los comensales, que degustaron ricos manjares, etc. Las chorradas también tienen su lugar en el texto: “Al abrir el barril se descubre el típico avituallamiento del aficionado a las motos: agua, vino, cervezas y mucho hielo”. Efectivamente,  tan cierto como que  el típico español es bajito, renegrido y cejijunto, bebe vino en porrón y se rasca los huevos.
En conclusión: un texto infumable. Produce repelús. O “repelousse”, que escribiría doña Maribel.

Evaristo Torres Olivas
Aunque pretenda disimular con esa camiseta, estamos frente al típico español: bajito, peludo y rascándose los huevos. 

2 comentarios:

Abogado dijo...

Hoy puedes ver en Diario de teruel Edición Digital un artículo de la susodicha que titula:Alcañiz mantendrá las 7 de la mañana como hora MÁXIMA de apertura de bares en la Moto GP". ¿ Y la mínima cúal es? El horario es desde las siete de la mañana hasta la hora que está establecida para el cierre. Ni máximo ní mínimo. El problema es que está gente crea opinión ya que el país está como está al permitir que estos personajes escriban en medios públicos.

Anónimo dijo...

Cualquier imbécil sabe a qué se refiere con lo de horario máximo.si tú no lo entiendes, igual deberías leer el Mortadelo en lugar del periodico. Gracias a perfeccionistas como vosotros Teruel es una provincia tan maravillosa.