“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

miércoles, 23 de octubre de 2013

Los sindicatos

Si alguien se atreve a criticar a los sindicatos, enseguida le  tildan de derechista anti obrero o cosas peores. A una columna que escribí en el Diario de Teruel en 2010, me contestó un dirigente sindical, Manuel Martínez Morales, secretario de Formación y Política Institucional de Comisiones Obreras de Aragón, y argumentaba  que los que critican a los sindicatos pertenecen “a los sectores más retrógrados y casposos de este país”. A mí me acusaba de unirme al “coro de voceros antisindicales” y no sé si me ubicaba en el “sector casposo de la derecha” o en el de la “falsa progresía cuya virtud es que por fin están saliendo del armario y mostrando su verdadera cara”.
Ahora vuelvo a criticar a los sindicatos por toda la mierda que está saliendo a la superficie por su papel en los EREs de Andalucía. Se podrá argumentar que comparado con lo que chorizan otros, lo de los sindicatos es algo insignificante. O se podrá pensar que la crítica a los sindicatos es una maniobra para desviar nuestra atención y dejar de fijarnos en el los casos de Bárcenas, Fabra, Urdangarin y otros.
Yo no creo que sea así. Y además me cabrea mucho más el asunto de los sindicatos que los otros. Del PP, de la Monarquía o de los empresarios lo único que espero es que me  estafen. No me representan, no me defienden. No quiero nada de ellos. Por eso no voto al PP y por eso soy republicano. De los sindicatos sí espero mucho más, porque en sus siglas llevan la palabra obrero, porque dicen ser organizaciones de clase. Yo quiero que las instituciones en las que creo sean un ejemplo de honradez y transparencia. Que ni un euro de los que reciben se gaste  de forma inadecuada. Que no se hagan las víctimas cuando se les critica por las barbaridades que se han cometido en Andalucía, sino que aparten a los sinvergüenzas,  tomen medidas y pongan controles para que no vuelva a suceder. Y que renuncien a la financiación del Estado. Para ser libres y deberse únicamente a los trabajadores que son su razón de existir.
 Y si mis palabras molestan a los dirigentes sindicales, pues que les den morcilla.

Evaristo Torres Olivas

10 comentarios:

Anónimo dijo...

El montante de los "ere" parece que supera los 1.200 millones de euros, ojo, son cifras más que considerables.
Yo también espero de la Monarquía que me defraude o que me estafe, pero de la República también aguardo lo mismo, o es que acaso en la ella solo cabe gente honrada. Imaginate que se instala la República, se elige por sufragio universal a su presidente, and the winner is ... ¡Aznar!, ¿te seguirías fiando de la República?

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo.Pero reconocerás que hay una campaña en toda regla para cargárselos:no convienen a la derecha de este país.Y lo más triste es que mucha gente,especialmente los empleados por cuenta ajena(los de sueldos medios o bajos), muchos parados y pensionistas parecen no saber que son la única defensa frente a los
que nos quieren hacer retroceder al siglo XIX o principios del XX.

Abogado dijo...

Desde el momento que reciben dinero del Estado, son corruptos.

Anónimo dijo...

Que les den morcilla también por mi

Anónimo dijo...

El funcionamiento de los sindicatos en la ciudad de teruel ha sido y es muy "peculiar": Apenas se ven diferencias entre UGT y CCOO, de hecho las presidentas parecen gemelas en su actuación.

Hace unos años encontré un liberado sindical de Enseñanza por Comisiones Obreras que poco más tarde fue director provincial de la Psoe en dos ministerios diferentes. No lo entendí.
Para mi UGT es PSOE Y Comisiones es la Izquierda. En Teruel tanto monta Ugt como Comisiones. No me gusta esa identidad que también se está viendo últimamente a nivel nacional.

Anónimo dijo...

Yo he visto pagar con visa oro cubatas en un puti cub de Teruel. Por un delagado de ugt.
Comidas y cervezas ni te cuento. Y hoteles de los buenos 4 y 5 estrellas.

Anónimo dijo...

Algunos sindicatos hay que no reciben dinero del estado, pero son pocos.

Ccoo y Ugt reciben mucho dinero del estado (y de más sitios). Conocemos sus actos y sus no actos.
¿Casualidad o causalidad?

Anónimo dijo...

Me gustaria saber en que trabajan o han trabajado los que critican a los sindicatos.Si pertenecen a los colectivos que cito en el 2ºcomentario, "apaga y vamonos".Más les valdría hacer un balance y ver lo que tienen gracias a ellos y lo que tendrian si no hubiesen existido.¿O acaso piensan que los que mandan nos han regalado algo por nuestra cara bonita?

Anónimo dijo...

Los sindicatos tienen que existir, pero sin mangantes. Que actualmente es como decir, que desaparecen.

Anónimo dijo...

Efectivamente, anónimo del 24-10-13 a las 19:05, los sindicatos (muchos) y los movimientos sociales conquistaron una vida menos miserable para todos nosotros (trabajadoras, inmigrantes, estudiantes, gente que hace labores del hogar, etc...); por eso mismo hay que criticar duramente, y mucho, a organizaciones como Ccoo y Ugt, que llevan desandando el camino de las conquistas sociales y conteniendo cualquier reivindicación seria desde hace décadas... a cambio de múltiples y jugosos ingresos directos o indirectos provenientes del estado y otras instituciones.

Como los que mandan jamás nos regalarán nada, sino que ya están recuperando lo poco que perdieron, hay que denunciar a quienes firman las pérdidas de derechos de millones de trabajadores sin ni tan siquiera haber peleado (los simulacros no cuentan).

Tampoco olvidemos que sólo el 10% de la población activa del estado español está afiliada a Comisiones o a Ugt. El que sean los "sindicatos" con mayor número de personas afiliadas no significa que puedan firmar nada en nombre del otro 90%, que o está en otros sindicatos o en ninguno.

Lo que está claro es que todo está montado de manera que el gobierno y la patronal tengan unos interlocutores cómodos y blandos con los que hacer como que negocian y, simultáneamente, lanzar a la sociedad una imagen de diálogo entre las partes, "democracia" y, por añadidura, con "libertad de elección" entre sindicatos, aunque como el dinero lo tienen dos, la gente casi sólo conoce a esos dos y atraen mucha más afiliación.

Vistos los resultados después de todos estos años de "democracia", a una trabajadora cualquiera lo mismo le da afiliarse a Ugt/Ccoo (y otros de similar jaez) que pagarle la cuota directamente a la Ceoe o a Cepyme.
Es triste, pero es así.