skip to main |
skip to sidebar
“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino
Miles de chicles
La semana pasada les conté en este espacio cómo el alcalde
Blasco y su segundo Segundo hacían el chorras
simulando que rascaban chicle en el pavimento bajo los arcos de la plaza
de San Juan. Hoy quiero recrear para ustedes cómo creo que se desarrollaron los
hechos. Imagino dos escenarios diferentes. El primero, que alguien del
ayuntamiento (seguramente la secretaria del alcalde a la que acaban de subirle el sueldo un
treinta por ciento) llamaría al Diario de Teruel. Tal vez al director gerente,
o al director de contenidos, o al subdirector, o a la jefa de local (el Diario
tiene muchos jefes) para pedirles que de parte del señor alcalde envíen un periodista y un fotógrafo a la plaza de San Juan porque se
va a proceder a una rascada de chicles en la que van a participar el señor
alcalde, como director de operaciones y padre de la idea, y su segundo Segundo,
en calidad de jefe de obra. El segundo escenario, más ortodoxo y más respetuoso
con la línea de mando, habría ocurrido más o menos así: la secretaria del
alcalde (a la que acaban de subir el sueldo un treinta por ciento) llama a la
secretaria—o secretario—de la presidenta
de la Diputación (y también presidenta del PP y presidenta del Diario de
Teruel). Oye, le dice, que el señor
Blasco quiere hablar con la señora Pobo. Te paso. Buenos días presidenta.
Buenos días Manolo. Presidenta, que quiero que salga en el Diario que tú
presides algo muy importante para Teruel y para nuestro partido, que tú también
presides. (Y le larga lo de la operación Bazoka). Cuenta con ello, Manolo. A
continuación, la que todo lo preside, llama al director gerente del Diario de
Teruel, Juan Ignacio Alfonso Gracia y le ordena que ordene al director de
contenidos, Chema López Juderías, que ordene al subdirector, Juanjo de
Francisco Valero, que ordene a la jefa de la sección de Local de Teruel, que ordene a un redactor y un fotógrafo que
se presenten en la plaza de San Juan para recibir instrucciones del director de
operaciones (y alcalde de Teruel) de la arrancada de chicles. Y es así cómo se
presentaron Pilar Fuertes e Ismael Ramón en el lugar de los hechos para que los
ciudadanos nos enteráramos al día siguiente de este acontecimiento histórico de
despegada de goma de mascar. Lo
titulaba así el Diario del día 26 de marzo: Los operarios municipales retiran
miles de chicles del pavimento. Seguro que el cronista oficial, Vidal
Muñoz, lo recoge en su memoria anual. Y tal vez, dentro de unos siglos, una
Raquel Esteban de entonces sueña con la recreación de una fiesta en Teruel en
la que el pueblo se disfraza de barrenderos y barrenderas, con su carrito de
limpieza y su rasqueta, y se escenifica la histórica hazaña del despegado de la
goma. Los papeles principales que los actores representarían serían los de los
personajes históricos María del Carmen
Pobo y Manuel Blasco. Y alrededor, para darle realce a la representación,
estarían los roles del segundo Segundo, el director gerente del Diario, el
director de contenidos Chema… hasta llegar al del fotógrafo Ismael. En las calles
habría tenderetes en los que se vendería todo tipo de chuches, especialmente
chicles; acudirían algunos turistas para aliviar durante un fin de semana la
economía de la ciudad y de la provincia, que por culpa de unos políticos
ineptos(descendientes de guillenes, arrufates, larredes, bieles, blascos y
pobos) seguirían despobladas, mal comunicadas y abandonadas.
Evaristo Torres Olivas
Estatua al prócer Blasco
No hay comentarios:
Publicar un comentario