“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

jueves, 15 de diciembre de 2011

Liquidar

Escribo esta columna para decir que yo no he sido, que cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. Sé que este blog lo leen millones de personas en todo el mundo y que su influencia es enorme, pero en este caso no he movido ningún hilo. Ayer les contaba que a Urdangarin le quedaban dos telediarios y así ha sido.  No es que el rey ya  no pueda ver a su yerno ni en pintura, es que tampoco lo puede ver en cera. Los periódicos publican que el comité de dirección del Museo de Cera de Madrid se va a reunir hoy mismo para trasladar la figura en cera de don Iñaki lejos de la familia real, seguramente a la sección de deportes. Le quitarán el traje y le pondrán unos pantalones cortos y una camiseta y hala, de duque de Palma a balonmanista con dos palmos de narices. Y veremos por cuánto tiempo. Si le aplican la misma medicina que al excuñado Marichalar, será cuestión de meses. A don Jaime lo pasaron de la sección Familia Real a la taurina y allí le dieron la puntilla antes de enviarlo, por los siglos de los siglos, al almacén. Seguramente, don Iñaki también pasará por el purgatorio de la sección de deportes antes de acabar en el cielo del almacén. Lo que ya no sé es si en ese cielo del Museo, las figuras de cera las conservan tal cual o las liquidan (sinónimo de licuar, pero en el caso de Urdangarin y de Marichalar, pienso que se ajustaría más a la realidad decir que los han liquidado antes que los han licuado). Pero repito, yo, en toda esta historia, no he tenido nada que ver. No niego que los que dirigen el Museo de Cera hayan podido entrar en mi blog y, después de leer la columna de ayer, hayan decidido adelantar lo que de todas maneras ocurriría tarde o temprano. Ni tampoco niego que el mismísimo rey haya podido leer la entrada sobre su yerno y haya llamado a la dirección del Museo de Cera para adelantar la liquidación. Quien estoy seguro de que no ha entrado es don Iñaki; de haberlo hecho, habría dejado algún comentario para aclarar que es inocente, que la prensa se ha cebado con él antes de tiempo, que él no se ha apropiado de nada y que ha sido víctima de unas maniobras orquestadas para que trasladen su figura a la sección de balonmano del Museo de Cera para después liquidarlo en el almacén.
 
Evaristo Torres Olivas
Foto: diario Público

3 comentarios:

Anónimo dijo...

De aquí a unos años de silencio en los medios de comunicación, si alguien les pregunta, pasará de ser Duque de Palma, esposo de la Infanta Doña Cristina y suegro del rey, a ser un vasco que trincaron en su casa por presunto robo mientras bebía una fanta y veía en Tv "El rey pasmado"...

Anónimo dijo...

Je, pues me he acordado de ti al leer la noticia y pasaba darte la nueva pero veo que estás más que al día. http://ccaa.elpais.com/ccaa/2011/12/14/madrid/1323874288_830361.html

Pablo dijo...

Vaya, llevaba unos días sin leer y he hecho el comentario al respecto hace un momento en el artículo anterior, antes de ver que ya lo tenías controlado.