“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

domingo, 1 de mayo de 2011

En las nubes

Don Vicente Guillén nos ha salido volandero, volante o volantín. En su tribuna del Diario de Teruel del pasado día 29 de abril, titulada Volando voy, demuestra que está en las nubes. Tiene don Vicente una virtud: la de encabronar a todo el mundo, tanto a los suyos como a los adversarios políticos. Su estilo es una mezcla entre chulo de barrio y sargento chusquero. Por mucho que firme como diputado del GPS, da la sensación de que el GPS lo tiene estropeado y anda el pobre señor totalmente desnortado. No se pueden decir tantas sandeces en tan poco espacio. Por si fuera poca la confusión sobre el aeródromo de Caudé, don Vicente se encarga de añadir más desinformación. No sabemos si se crearán cien puestos de trabajo, quinientos o doscientos veinticinco. Ojalá fueran dos mil. El proyecto del aeródromo ha sido y es un ejemplo de confusión y  mala gestión de la comunicación. Don Vicente, como secretario general en Teruel del partido que gobierna y que es responsable del proyecto de Caudé,  se supone que debería tener datos fiables sobre las empresas que han optado a la gestión del mismo. Pues no es así. Don Vicente no sabe de la misa la media. Ni siquiera es capaz de traducir la información en inglés y en francés que aparece en internet sobre la filial de Airbus, Tarmac Aerosave. Escribe en su tribuna que esa empresa “permite que los aviones sean reconstruidos…asegurando la trazabilidad de las piezas de segunda mano y los elementos valorizables y no valorizables”. El señor Guillén demuestra su ignorancia de los idiomas inglés y  francés. La empresa no reconstruye aviones sino que los desmonta, desarticula, despieza, desmantela, desguaza. Cualquiera de estas acciones hubiera sido correcta, incluso la de deconstruir (en homenaje a Jacques Derrida, padre del deconstructivismo, que también era francés). Pero además, el diputado desorientado del GPS, también desconoce su idioma materno, aun siendo licenciado en letras. No solamente por escribir  “elementos valorizables y no valorizables” sino por decir que la señora Rudi (y no Rudí como él lo escribe) se desvela en su “nonata tierra de Madrid”. Don Vicente es un político de cortos vuelos. Alicorto. Desvalorizado. Devaluado. Depreciable y despreciable. “Achatarrable”.


Evaristo Torres Olivas

                                  Cómo construir un avión

 Diario de Teruel, 29 de abril de 2011




6 comentarios:

Anónimo dijo...

Eres bueno, bueno, rebueno.
Estoy enganchada a tu blog.

Anónimo dijo...

Pues ya que lo dices....
Yo que siempre estoy en la nubes, recuerdo haber visto a este sujeto un par de veces.

Anónimo dijo...

No tengo palabras, el jefe provincial del PSOE, además de no tener ni idea de idiomas ni de usar el diccionario, no sabe de qué va uno de los proyectos estrella para Teruel de su partido.

Por todos es sabido que se trata de una empresa de "desguace" de aeronaves. Igual el señor cree que, a bajo coste, montan, "reconstruyen" allí aviones con piezas de desguace! Quizás así los "adinerados" del terreno y los altos ejecutivos se puedan comprar uno para llegar antes a Zaragoza...

La próxima vez que suba en avión me aseguraré de que no le hayan hecho "la revisión" en Caudé.
Esto es de traca!

Anónimo dijo...

¡Si es que no tienen remedio! ¡Con lo que podrían aprender los señores Guillén y Arrufat leyendo tus artículos en el Diario de Teruel! Pero,amigo, cuando está en juego la poltrona hay que echar mano de la mordaza para acallar las voces que les estorban. Menos mal que vivimos en un régimen democrático. No quiero ni pensar qué hubieran hecho estos tíos "encapsulados" en un sistema dictatorial. Un abrazo, Evaristo... y sigue moliendo fino, perillán.

Anónimo dijo...

Lo que me "rejode" es que por mucho que nos quejemos, ¡Ahí están!, efectivamente: APOLTRONADOS, y los demás (entre los que me incluyo), sin hacer nada.
De poco sirve lamentarnos, pues no somos de capaces de decir:¡BASTA YA!

Anónimo dijo...

Ellos no necesitan ser rigurosos, ni demostrar conocimiento alguno de ortografía, idiomas u otros, les vale tan sólo con agitar el ambiente, que se les vea.
Saben que van a salir, que van a estar ahí ocurra lo que ocurra a corto, medio y, al menos, bastante largo plazo. Viven tranquilos, aunque a veces no lo parezca.
Las ideas que la caja tonta y otros nos escupe desde pequeñitos son las que luego se votan mayoritariamente en esta sociedad.
Los peones de la política, como el mencionado, tienen casi todo el trabajo sucio hecho de antes.
Por eso estamos así.