“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

domingo, 22 de mayo de 2011

El embarazo de Carla, las pelotas del Tigre y Clooney

Hoy es día de votaciones y cada cual votará a quien quiera. O no votará, que también está en su derecho no ejercer un derecho al que tiene derecho. No hablaré de política sino de embarazos y titulares de prensa. Carla Bruni está embarazada. Lo he leído en un artículo del Heraldo de Aragón. Rezaba el titular: “Confirmado el embarazo de Carla Bruni por el padre de Sarkozy”. Lo primero que he pensado es que los franchutes son unos depravados. Primero el escándalo de Dominique Strauss-Kahn con la empleada de un hotel en Nueva York y ahora el padre de Nicolas, Monsieur Pal Sarkozy, de 82 años,  que deja preñada a la nuera. He tenido que leer la noticia entera para enterarme de que la realidad no es como la cuenta el titular. El agente “preñante” no es el padre, Pal, sino el hijo, Nicolas. La preñada sigue siendo Carla. Lo único que ha hecho el padre, Pal, ha sido confirmar la preñez de la nuera, Carla. Con lo fácil que habría sido escribir: El padre de Sarkozy confirma que Carla Bruni está embarazada. O si se quiere titular como hacen los americanos: Pal, padre Sarkozy, confirma: Carla preñada. Se habría evitado que yo hubiera tenido un concepto tan negativo sobre los políticos franceses. Y es que a veces los periódicos, en lugar de aclarar e informar, lo que consiguen es confundir y hacernos creer lo que no es. Un periódico americano escribió en primera plana que Tiger Woods jugaba con sus propias pelotas. Al leer el artículo, el lector se enteraba de que un representante de Nike afirmaba que Tiger Woods no utilizaba pelotas de la marca Nike sino que jugaba al golf con pelotas de otra marca. Hay que tener mucho cuidado con ciertas palabras que pueden inducir a errores imperdonables. Imaginen que George Clooney tiene  por mascota a un cerdo al que quiere mucho; imaginen también que el cerdo se muere. Un vecino se entera de la triste noticia y llama al periódico Los Angeles Times. Al día siguiente aparece en portada con letras enormes este titular: Clooney´s pig dies. Se entera Antonio Arrufat, presidente del Diario de Teruel, que chamulla algo de inglés y es veterinario y ordena que  aparezca también en portada en nuestro querido Diario, con letras más gordas que las del Los Angeles Times, este titular: Muere el cerdo de Clooney. El diario El País lo habría titulado: “Muere 'Max', el cerdo mascota de George Clooney”. El País tiene mucha pasta pero en Teruel no estamos para derrochar tinta innecesariamente. Que gane el partido que más votos obtenga. Feliz domingo.

Evaristo Torres Olivas

En España tenemos unos aviones cojonudos

1 comentario:

Anónimo dijo...

Feliz Domingo Evaristo, y gracias por todo lo bueno que aportas a nuestras vidas.
Que sepas que te queremos.
WAM