ToricoLeaks

¿Se imaginan lo que podría pasar si en Teruel, en vez de tanta opacidad, tuviéramos un WikiLeaks? Lo podríamos llamar Goteo Mudéjar, Filtraciones Los Amantes, Fugas El Óvalo, Chorreo Obispo Polanco o ToricoLeaks. Consistiría en que en todas las instituciones públicas, ciudadanos y funcionarios íntegros, filtraran información, documentos, acuerdos, actuaciones de los políticos que contradicen sus afirmaciones públicas, sucias maniobras, cobro de comisiones, enchufe de parientes, salarios y dietas, entradas gratis, ocupación por familiares de pisos de las instituciones y demás chollos de los que disfrutan. Esos que a pesar de la transparencia que predican hacen todo lo posible para que no nos enteremos. Imaginen que un ayuntamiento fracciona una obra para evitar someterla a concurso público y así adjudicársela a un amigo. Ahora no nos enteramos o si lo hacemos, ya han pasado mil años. Si un puñado de funcionarios, concejales y diputados honestos, se dedicaran a facilitar esa información a ToricoLeaks, los ciudadanos sabríamos qué se cuece en las cocinas del poder. Se podrían publicar todas las filtraciones en un dossier especial de la revista Turia. Imaginen el Museo Provincial abarrotado: la mitad de los asientos reservados, como siempre, a los políticos, muchos de los cuales utilizan la revista que se les regala para calzar la mesa del comedor, porque leer no leen mucho, por no decir nada. Imaginen que Raúl Maicas, en su habitual discurso, empieza a desgranar una a una todas las filtraciones difundidas por ToricoLeaks. Entonces llegaríamos a la esencia del periodismo: difundir aquello que alguien no quiere que se sepa. En lugar de los titulares propagandísticos del Diario de Teruel, del tipo: “Marcelino Iglesias: Es progresista reformar las pensiones”, se podría publicar en las páginas de ToricoLeaks: El consejero Manolo despide a un trabajador y coloca en su lugar a su hija Manola como encargada de las obras de de un proyecto público. O: Diputada provincial aloja a su hijo en un piso de la Diputación sin pagar un céntimo. O quizás: “Empresa puntera contrata como directivo a un dirigente sindical histórico. Teruel sería entonces un lugar más decente y con menos sinvergüenzas.

Evaristo Torres Olivas