El faldón de Toni Losantos del día 28 parece un manifiesto reivindicativo del gremio de columnistas del Diario de Teruel. Don Toni se erige en vocero de sus pobres compañeros, enumerando los peligros de la profesión: falta de inspiración, hastío, tiranía del calendario y sobre todo, exposición a los francotiradores y quintacolumnistas que se agazapan en las Cartas al Director, esos “émulos de Saturno, martillo de columnistas”. Sólo le falta añadir que no están dados de alta en la Seguridad Social, que no tienen pagas extraordinarias y ni siquiera ordinarias. Para llorar. Este modesto okupa, morador de los suburbios de la Metrópolis, les recomienda que se encomienden a San Simeón el Estili(s)ta o a su discípulo Simón ( el de Buñuel, no el del tetrabrik). Y si no obtienen respuesta a sus justas peticiones, que le pidan ayuda al responsable del Humor Gráfico: una viñeta con una pancarta con el siguiente mensaje: Toni, Elifio, Rafael y Manuel, víctimas de la violencia de género periodístico.
Evaristo Torres Olivas. Villarquemado
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