“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

jueves, 27 de noviembre de 2008

Amor, amor, a morcilla

Algo está cambiando en el PP. Se acabó la crispación y el insulto. Volvieron los buenos modales. El secretario del Partido Popular de Alcañiz, Nacho Esparells, le escribe una carta de amor a Amor Pascual, alcaldesa de la localidad (Diario de Teruel, 5 de junio). ¡Cuánto cariño hay en las palabras de Nacho. Encabeza su misiva con amor, sencilla y tierna palabra y le confiesa a su adoraba alcaldesa que “donde reina el amor, sobran las excusas”. Yo que no me emociono con facilidad, al leer las frases que el secretario dirige a su amada, he llorado a moco tendido, como cuando vi la peli de la Bella y la Bestia. Le habla de la escuela infantil, de puntos limpios y de un rebaño de ovejitas pastando. Imágenes bucólico-pastoriles que me recuerdan a Heidi y a Pedro, a Isabel y a Diego, a los Capuleto y a los Montesco, al olor del pan recién hecho, a tierra mojada, al frescor salvaje de los limones del Caribe. Imagino a Amor y a Nacho, sentaditos en el pupitre de la escuela pasándose poesías de Becquer, “tu pupila es azul y cuando ríes….”. Los veo paseando de la mano por la Plaza de España, tomando la Primera Comunión en la Colegiata. El tiempo y las familias los fueron alejando pero se mantuvo el rescoldo de la pasión en sus corazones. Nacho finalmente se ha atrevido a hacerlo público. No le importa que le expulsen del partido, donde como él dice, es un “militante en segundo plano”. ¿Qué le contestará Amor? Me muero de ganas de saberlo.
Evaristo Torres Olivas. Villarquemado

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