Manuel Rando, socialista, presidente de la Diputación de Teruel, escribió un artículo de opinión en Diario de Teruel el pasado martes, 27 de octubre. Un extenso artículo para contar algo que se podría decir en menos de dos frases: que luchar contra la Covid-19 es asunto de todos y que las instituciones están para ayudar. Pero eso no es lo peor, porque al menos gran parte de sus palabras están cargadas de buenas intenciones. Lo peor es que las declaraciones de los políticos son tan previsibles que antes de empezar a leerlas uno ya sabe qué van a decir. ¿Qué va a decir un presidente de la Diputación de Teruel sobre el Gobierno de España, presidido por un socialista, y sobre el de Aragón, presidido por otro socialista? Correcto, lo han adivinado: “Tanto el Gobierno de España como el Gobierno de Aragón actúan con responsabilidad ante el crecimiento imparable de los contagios en el conjunto del país y en nuestra provincia”. ¿Y qué dice el presidente socialista de la Diputación de Teruel sobre los otros políticos que no son de su partido? También lo han adivinado: “Tanto el Gobierno de España como el Gobierno de Aragón anteponen siempre en sus decisiones el criterio sanitario, al contrario de lo que hacen otros responsables políticos que usan de forma irresponsable la crispación en discursos que nada ayudan al bien común”. En lo único que se diferencian las palabras del señor Rando, socialista, de las de la alcaldesa Emma Buj, del Partido Popular, es en que el malo del uno es el bueno del otro. Todos lo demás es idéntico: razonamientos simplones, acusaciones al adversario sin pruebas y elogios gratuitos a los suyos. Todos acusan al adversario de querer destrozar España, Aragón o Teruel. Y todos se cuelgan la medalla de que si España, Aragón o Teruel no están destrozados es gracias a su partido. Tal endeblez para argumentar es preocupante. El señor Rando, que es maestro especializado de Ciencias Sociales, ¿qué nota le pondría a un alumno que en un examen escribiera que los españoles son los únicos responsables y honestos y que todos los demás, empezando por nuestros vecinos franceses y portugueses, son irresponsables, ladrones y hablan en un idioma raro? Seguramente, un cero. La misma nota que le pongo yo a él.
Evaristo Torres Olivas
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