“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

lunes, 11 de noviembre de 2019

Los principios y los afectos

El pasado 1 de noviembre, en el arranque de la campaña electoral, Diario de Teruel publicaba en portada una foto de candidatos en las próximas elecciones. Seis candidatos que sostienen un cartel de sus partidos o agrupación de electores (Teruel Existe). Llama la atención, en primer lugar, que de los seis candidatos de la foto, solo hay una mujer (Anabel Gimeno). En segundo lugar, que de los seis carteles que exhiben, en cinco de ellos aparece la foto de un hombre, el líder del partido en Madrid. Ni una sola mujer; solamente hay uno sin foto, el de la agrupación de electores, en el que figuran las letras Teruel Existe. También me ha sorprendido que sea Anabel Gimeno la que sostenga el cartel con la imagen en primer plano de Pablo Iglesias. La señora Gimeno es el ejemplo más claro del trepa político, persona que progresa por medios rápidos sin escrúpulos. Durante años echaba pestes de Izquierda Unida y ni una sola vez apareció por la sede de ese partido en Teruel. Ni estaba ni se la esperaba en los rendimientos de cuentas de José María Martínez, ni cuando vinieron a Teruel Cayo Lara, Patricia Luquin o Álvaro Sanz. Cuando Alberto Granados inventó CUIZ, Ciudadanos por la Unidad de la Izquierda, para promocionarla a ella, jamás dijeron, ni el uno ni la otra, que fueran de IU . Durante años ha echado pestes contra Podemos y sus líderes, tanto locales, regionales o nacionales.  Cuando se presentó por Ganar Teruel, tampoco se identificó como afiliada ni simpatizante de Izquierda Unida.  Pero desde hace un tiempo no solo se dice de IU sino que aparece en todos los foros y en todas las fotos, pegada a Álvaro Sanz, coordinador de Izquierda Unida en Aragón.  Y ahora no tiene ningún inconveniente en sostener el cartel con la cara de Pablo Iglesias. Eso es lo que se llama coherencia, firmeza, criterio y responsabilidad. Seguramente ella pensará, al igual que Groucho Marx, que si no nos gustan sus principios, tiene otros. Unos principios que la convierten en una todoterreno, que lo mismo sirve para concejala, diputada provincial, consejera de Deportes de la Comarca Comunidad de Teruel o aspirante a senadora. Otra prueba más de por qué los políticos, de todos los partidos, son los que inspiran menor confianza en todas las encuestas.
Evaristo Torres Olivas

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