“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

jueves, 4 de enero de 2018

La importancia de una coma

“Morton se confiesa “emocionado” y ve en la actriz estadounidense que ha abandonado su carrera por amor a una mujer con “muchísimo carisma” que será “una estrella de la realeza y que tendrá un tremendo impacto en la familia real y el resto del mundo””. La anterior parrafada, sin puntos ni comas, la escribe la periodista Mábel Galaz, especialista en asuntos de monarquías, en un artículo publicado en el diario El País  el pasado 14 de diciembre. El artículo nos cuenta los preparativos de la boda del príncipe Harry, hijo de El Orejas y de Diana, con la actriz Meghan Markle  y de la biografía que le está escribiendo Andrew Morton, quien ya escribió la de la princesa del pueblo, no Belén Esteban sino la otra, Lady Di.  No poner ningún signo de puntuación en frases largas es muy peligroso. Nos puede dejar sin respiración y producirnos un desmayo, en el peor de los casos; en otros, si leemos el texto en voz alta,  al sentir que nos falta aire, aumentamos la velocidad y logramos que se nos aflaute la voz, que se nos amontonen las palabras y que no se nos entienda ni papa. Una coma puede conseguir que nos metan en la cárcel o que nos manden a casa, como en este conocido ejemplo: no es lo mismo escribir perdón imposible, que se cumpla la condena que escribir perdón, imposible que se cumpla la condena. Tampoco es lo mismo plasmar sobre el papel no tengo novia que no, tengo novia. En la kilométrica cháchara que encabeza esta columna, debido a la inexistente puntuación, no sabemos si Meghan ha abandonado su carrera por amor a Harry, por amor a una mujer o si Harry es en realidad una mujer. Tampoco sabemos si quien tiene mucho carisma es Meghan, Harry o la otra mujer.  En lo  que sí acierta la periodista es en que, tanto si Meghan se va con una mujer como si Harry es mujer, tendrá un tremendo impacto en la familia real y el resto del mundo.

Evaristo Torres Olivas

1 comentario:

Anónimo dijo...

Así es Evaristo: las pitonisas romanas, cuando los soldados, antes de ir a una batalla, les preguntaban si moririan en dicha batalla, ponian: VIVIRÁS NO MORIRÁS. Siempre acertaban. Saludos y no tardes tanto en escribir.