“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

jueves, 5 de octubre de 2017

Los gatos y las gatas son felinos y felinas

En algunos partidos, principalmente de la izquierda, se abusa del mal llamado lenguaje inclusivo para evitar el sexismo lingüístico  y la invisibilidad de la mujer. No quiero pontificar sobre un campo del saber en el que no soy especialista. Solamente diré que me aburren los discursos llenos de señoras y señores, todos y todas, compañeros y compañeras, niños y niñas. Me agotan las repeticiones de  estamos hartos y hartas, contentos y contentas. Y me confunden quienes utilizan el género femenino como género no marcado para incluir a hombres y mujeres. En Podemos Aragón, sus dirigentes son especialistas en crear confusión. Tanto Erika Sanz como Nacho Escartín, dirigentes que se han enfrentado para ocupar la secretaría general de Podemos Aragón, son especialistas en sembrar embrollos. Y Pablo Echenique, el secretario general saliente, un maestro en incoherencia. Una lengua funciona cuando hay acuerdo entre los hablantes sobre las reglas de juego. De lo contrario, el caos. Da lo mismo conducir por la derecha que por la izquierda, pero hay que ponerse de acuerdo. Lo que no puede ser es que cada persona decida por su cuenta por qué lado le apetece llevar el coche. Cuando la candidatura de Nacho Escartín pide el voto en un cartel de su candidatura con el eslogan “Todas juntas en el camino” no sabemos a qué atenernos; mucha gente pensará que solamente se dirige a las mujeres. Si decimos Nacho y Erika son amigos, todo el mundo lo entiende; si se dijera que son amigas, nos confundiría. Y si se opta por decir que Nacho y Erika son amigos y amigas, la economía del lenguaje se va al garete. Y ahora viene la incoherencia de Pablo Echenique. Tan defensor como es del lenguaje inclusivo, de todos y todas, compañeros y compañeras, no duda en escribir en su cuenta de Twitter el siguiente texto para quejarse de unas pintadas en la sede del partido: “Unos señores que se creen que España son ellos y van y votan a los de las cuentas en Suiza nos han decorado la sede de Podemos Aragón”.  Para Echenique, quienes pintan sedes y tienen cuentas en Suiza son solo hombres. O tal vez lo ha hecho por no superar los 140 caracteres si escribía que unos señores y señoras que se creen que España son ellos y ellas y votan a los y las de las cuentas…Y por otra parte, llamar señores a quienes pintarrajean fachadas tampoco es lo más adecuado.

Evaristo Torres Olivas

2 comentarios:

ABOGADO dijo...

Earisto, estos nuevos personajes tienen la meta de colocarse en el lugar de los anteriores, sin cambiar nada. Eso sí, la apariencia de ser más solidarios, permisivos, etc...¡ Que no te engañen!

Eduardo dijo...

Pues estando atascada la cloaca como lo está, vendría bien un poco de limpieza para que mejoren algo las cosas. Y hasta que creasen sus redes de corruptelas como ya tienen montados los del bipartito, pasaría algo de tiempo y los "preparaos" que se enchufan actualmente tendrían que buscarse las habichuelas en el mundo real.