Evaristo Torres Olivas
jueves, 20 de febrero de 2014
Puertas giratorias
Cuando los ciudadanos cabreados gritan en las
manifestaciones que PP y PSOE la misma mierda es habría que tirarles de las
orejas. No se pueden decir esas cosas a grito pelado en la calle en horario
infantil. Como muy pocas manifestaciones se hacen antes de las seis de la
mañana o después de las diez de la noche, que es el horario de protección
infantil establecido, habría que evitar utilizar palabras malsonantes. Y si
bien es cierto que el PSOE y el PP son la misma mierda, habría que cambiar
mierda por caca, que es lo que se les dice a los niños. Cada vez que un crío diga
PSOE o PP, gilipollas o tontolculo,
se le da una colleja a la vez que se
pronuncia la palabra caca. Eso sí que es educación para la ciudadanía, formar
en valores y hacer ciudadanos responsables. Pero claro, educar no es solamente
recriminar, sino que hay que darle explicaciones a la criatura. Hijo mío, fruto
de mis entrañas, tesoro mío, el PP y el PSOE son caca porque mira lo que
contaba ayer el periódico El País: Enagás nombra a cinco ‘históricos’ del PP en
su consejo. Y a continuación, se le contextualiza, que se dice ahora, la información: Corazón mío, mi pequeña
Vanesa, que eres toda una promesa, Enagás era una empresa pública que un señor
del PSOE llamado Felipe González, Isidoro o el Tigre de Suresnes (esto es
inventado, pero capta la atención de la zagala), privatizó. Ahora la dirige Antonio Llardén,
otro señor del PSOE que fue subsecretario de Obras Públicas, Transporte y Medio
Ambiente, en el gobierno del Tigre y vicepresidente de Caixa Catalunya en
representación del Ayuntamiento de L´Hospitalet de Llobregat (gobernado
entonces por el PSC). Y como PP y PSOE son lo mismo, ahora se incorporan cinco
consejeros del PP. Entre ellos, Hernández Mancha, Isabel Tocino y Ana Palacio. A
este fenómeno, príncipe mío, reina mía, se le conoce como puertas giratorias:
los políticos cuando dejan de serlo no van al paro ni vuelven a su trabajo
anterior a la política, sino que pasan a puestos muy bien remunerados en
empresas que su partido ayudó a privatizar. Isidoro, perdón, Felipe es
consejero de Gas Natural, Aznar, alias el presidente que habla español con
acento tejano o texano, lo es de Endesa. Y para acabar, se le pregunta a
nuestro retoño: Flor de mi secreto, carne trémula, ¿entiendes por qué te he
dado una colleja? Sí, mamá, sí, papá, porque la misma caca es.
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A samugazos
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