“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

miércoles, 5 de febrero de 2014

Con el Pepé al papasado

La Agrupación Local del PSOE de Teruel, de la que es secretaría general la acaparadora Mayte Pérez (dirige la agrupación local, es coordinadora de Política Institucional, es la jefa de los concejales del PSOE en el ayuntamiento, parlamentaria autonómica. Qué pocas luces deben tener los militantes del PSOE que obligan a doña Mayte a desempeñar tantos puestos, pobrecilla), ha distribuido por Teruel un panfleto que titula Con el PP, una vuelta al pasado. En resumen,  el panfleto nos cuenta que todo lo que hizo el PSOE es cojonudo y lo que hace el PP es una puta mierda. Tienen razón en lo de la mierda del PP, pero no la tienen cuando dicen que todo lo suyo es cojonudo. Veamos: Afirman que “la organización Transparencia Internacional sitúa al Ayuntamiento y a la Diputación en la penúltima posición respecto a la transparencia e información a los ciudadanos”. Es cierto, pero también es cierto que ocupaban esas mismas posiciones, puesto arriba, puesto abajo,  cuando mandaba el PSOE. También afirman que la chatarrería de la plaza Domingo Gascón sigue cerrada. Cierto, pero no menos cierto es que esa porquería, rechazada por los ciudadanos, fue obra del PSOE y es tan poco útil que ninguna empresa quiere explotarla. Del aeródromo, aeropuerto o como se llame, de Caudé, dicen que en 2004 Manuel Blasco lo llamaba chatarrería. Verdad. Marcelino Iglesias lo llamaba logística inversa, y en esa obra enterraron muchos millones de euros para que una vez terminado, el concurso para la explotación quedara desierto. Cuando ya gobernaba el PP, apareció  Tarmac y se nos apareció la virgen. Y el PSOE se adjudica el éxito. Esperemos que los millones enterrados en Caudé sirvan para crear puestos de trabajo y recuperar la inversión, que está por ver.
Así funciona tristemente este país, de los más corruptos de Europa cuando gobierna el PP y cuando gobernaba el PSOE, tanto monta, monta tanto.  En este juego que se traen los dos partidos que se turnan en el Gobierno, el PP acusa al PSOE de la herencia recibida y el PSOE acusa al PP de dilapidar lo recibo. Después, todos juntos, PP y PSOE, se ponen de acuerdo para subirse el sueldo.

Evaristo Torres Olivas

5 comentarios:

Anónimo dijo...

El panfleto del psoe que han distribuido por Teruel es un insulto a la inteligencia de la gente.

No es que sea nuevo, pero trasluce muy bien el concepto que tienen de la "masa votante" estas lumbreras chupópteras.

Anónimo dijo...

Al tiempo,y ojalá me equivoque, pero si en las elecciones generales e incluso municipales el pp o el psoe ven peligrar su posición de bipartidismo, son capaces de aliarse con tal de seguir chupando del bote.
Y,cuanto a la Pérez, le digo lo mismo que a Urquizu, ESGARRAMANTE, VIVIDORA Y CANTAMAÑANAS y añado también soplagaitas.

Anónimo dijo...

Y todo eso, ¿a cuento de qué? ¿De las europeas? Pues vaya pijada.

Trallero despistado dijo...

Dices de la plaza Domingo Gascón que ninguna empresa quiere explotarla; si realmene la licitasen para eso, para explotarla, no creo que el concurso quedase desierto. Yo mismo estaría encantado de hacerlo, así, como el no quiere la cosa, cual Peter Sellers volando aquella fortaleza, al inicio de la película El Guateque. Oh, qué placer.

Anónimo dijo...

Lo de la Plaza Domingo Gascón (¡Pobre Domingo!, ¿Qué hizo el hombre para merecer esto?) no fue cosa del PSOE, sino del megalómano Miguel Ferrer y del, por entonces, su padrino, José Ángel Biel. Los socialistas turolenses, atados al pacto del 'marcelinato', asentían y callaban ante los desmanes: Plaza Domingo Gascón, Glorieta, Plaza del Torico, etc. En aquel entonces el Ayuntamiento pagó 3 millones de pesetas por el montón de hierros que hay en una de las rotondas de la ronda de barrios, herrumbre que llegaron a calificar de obra de arte. Y todos callados.