“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

lunes, 20 de enero de 2014

Belén Esteban, Bisbal y el vestidito de la infanta

¿Qué se puede esperar de un país en el que las lista de los libros más vendidos la encabeza Ambiciones y reflexiones, escrito por la gran novelista Belén Esteban? Poco. Tal vez que un cantante de 34 años publique su autobiografía y la venda como churros. Eso es lo que ha hecho David Bisbal. Y tanto Belén como David han publicado en una editorial de las grandes, nada de cosas a medias. Les publica sus bodrios Espasa, del grupo Planeta. Y si se las publican es porque hay negocio, hay mucho gilipollas que ya las ha comprado y otros muchos que las habrán regalado para Reyes.

¿Y qué más se puede esperar de un país como este?  Que el vestido de la infanta Leonor en la felicitación de Navidad se haya agotado en la tienda “on line”. Y que un periódico serio como Heraldo de Aragón le haga a la firma que lo vende publicidad gratuita publicando en sus páginas, en vísperas del 6 de enero,  el siguiente texto: “En algunos establecimientos todavía tienen “stock” como es el caso de XXX (me niego a publicar el nombre en mi columna) en Zaragoza, calle XXX (me sigo negando a publicar el nombre de la calle), donde aún les quedan algunas tallas pequeñas”.  Seguramente, el redactor que ha escrito ese texto tiene algún pariente que es socio de esa cadena de tiendas o si no es así, quizás haya querido participar en  el embrutecimiento de un país ya muy embrutecido.

 ¿Nos queda algún consuelo? Sí. En Inglaterra, el vestido que llevó Catalina (la nuera del Orejas) en su primera foto después de parir se agotó en dos horas y se creó una lista de espera de más de un mes. Y Justin Bieber, otro cantante que no llega a los veinte años, también ha publicado su autobiografía y también arrasa en las librerías.

Se equivocan quienes dicen que cada vez se lee menos. No es cierto. La prueba la tenemos en que cuando aparecen grandes talentos como Belén, David o Justin, los libros se agotan, al igual que los vestidos de las princesitas borbonas, que estoy seguro de que son unas lectoras empedernidas, como lo es su abuelo, nuestro rey.
Evaristo Torres Olivas

La gran escritora Belén Esteban

3 comentarios:

Chema dijo...

Buen artículo Evaristo, como siempre.Se te echaba de menos, tienes a muchos a los que dar guerra

Anónimo dijo...

Las princesitas borbonas no tienen culpa de nada.

Anónimo dijo...

A menudo, para "ubicarnos" entre la gente del resto del mundo, se establecen comparaciones para ver nuestra posición respecto a otras personas.

Cabe preguntarse si en algún conjunto de población sobre un territorio de una cierta entidad en algún lugar del mundo existe hoy día la costumbre de leer material de calidad, en sus más diversas acepciones... me temo que la respuesta es negativa o, quizás, de habas contadas.

De ninguna manera pretende esto exculpar a los habitantes ibéricos, sino constatar que la incultura es uno de los más fuertes pilares sobre los que se asienta el ilegítimo y criminal orden imperante. Y seguirá fomentándose en cada lugar de la forma que les sea más conveniente, pues les asegura sus beneficios y su poder.