“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

jueves, 7 de noviembre de 2013

Periodismo de la señorita Pepis (II)

Decía ayer que,  no conforme con publicar publicidad  encubierta de un hipermercado el día 29 de octubre, el Diario de Teruel le hace otro regalo al día siguiente. Si el anterior se publicaba en la sección de Economía, el último se incluye en la de Teruel. Concluía mi columna afirmando que los periodistas y los responsables del periódico habían estudiado en la facultad de Periodismo de la señorita Pepis.
El del día 30, un artículo sin firmar (solamente figura Redacción Teruel) despacha, descaradamente, media página de publicidad del establecimiento de cuyo nombre sí me acuerdo pero no me da la gana hacerle propaganda. Pero la persona que ha redactado ese artículo no es un mal periodista solamente porque se presta a hacer pasar como información lo que no lo es, sino que además hace afirmaciones gratuitas como que “los turolenses acogen con agrado las novedades del establecimiento”. No da ningún argumento, ninguna cifra que respalden tal afirmación. Pero es que además, la única cifra que da en todo el artículo es incorrecta. Nos relata que “la tienda cuenta con una superficie de 4.550 metros cuadrados, tras haber ampliado su zona de ventas con la incorporación de una nave de nueva construcción de 1.550 metros cuadrados”. El día anterior se nos decía que “se han invertido tres millones  para ofrecer 3.000 metros cuadrados más que anteriormente”. A esta gente les da lo mismo tres mil metros que mil quinientos cincuenta. Periodismo de la señorita Pepis, en el que el dato y la precisión de la información importan un carajo.
Aunque Mari Cruz se queje de que la gente de a pie les demos consejos a los periodistas, y de que esa misma gente de a pie no tiene ni idea, yo le diría que  tal vez debería dirigir sus dardos a sus compañeros de redacción o a sus jefes. No es admisible que un periódico que pretende ser serio disfrace la publicidad de información, no compruebe los datos y escriba gilipolleces como que el nuevo establecimiento cuenta con un espacio dedicado al “universo del calzado y el del blanco hogar”. Tal vez esos universos deberían ser estudiados por los astrónomos del observatorio de Javalambre.

Otrosí: Cuando ya estaba escrita esta columna, leo en el Diario de Teruel del domingo, 3 de noviembre, una página entera de propaganda del dichoso hipermercado, en el que se nos cuenta, palabra por palabra, lo mismo que los dos periodistas habían escrito en en los artículos que critico en estas columnas. Los periodistas se limitaron a poner sus nombres y a disfrazar de información lo que les ordenaron los mandamases del tenderete. ¡Qué vergüenza!

Evaristo Torres Olivas

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sabeco, Evaristo, Sabeco

Anónimo dijo...

Simply, Evaristo, Simply