Clavar chinchetas con un martillo pilón

A ver si lo puedo resumir en pocas líneas: Un señor de un pueblo de Teruel encuadernó  en 50  volúmenes todos los ejemplares del Diario de Teruel durante once años (1979-1990) y ahora el ayuntamiento de su pueblo los ha regalado a la Diputación. El señor se llama Mariano y el pueblo Torrijo. No se trata de ejemplares únicos sino que también tienen copias de ese periodo en la sede del periódico y,  hace unos meses,  otra persona también donó a la Diputación una colección de ejemplares del Diario de Teruel de los años 1971-2009. Una información de tan poca entidad ocupa nada menos que dos páginas a cinco columnas de la sección de cultura del Diario de Teruel del jueves, 9 de mayo. Si al menos se  hubiera aprovechado para escribir un artículo literario sobre la figura del donante, Mariano López, que fue bibliotecario de Torrijo y responsable de ordenar y encuadernar los periódicos. Pero a Mariano se le despacha con dos frases y una foto en solitario. Quienes se erigen en protas son otros y acaparan todas las fotos en  gran tamaño y las citas. Acudieron a Torrijo nada menos que el vicepresidente de la Diputación, Francisco Abril, el diputado delegado del área de Archivos y Bibliotecas, Julio Esteban, el director gerente de Diario de Teruel, Juan Ignacio Alfonso, y el director  de contenidos del mismo periódico, Chema López.  A esto se le llama matar moscas a cañonazos. También asistieron el alcalde y varios concejales.  Da la casualidad de que tanto los dos diputados provinciales, el alcalde de Torrijo, cuatro de los seis concejales y Chema López son afiliados al PAR. Han aprovechado una noticia que no debería ocupar más de media docena de líneas para hacer un publirreportaje de dos páginas, con fotos en color de los hombres del PAR de Teruel. Tal vez crean que con esto lograrán dar una buena imagen de su partido,  pero es todo lo contrario. A mí, por ejemplo, me hace pensar en la falta de criterio de esos señores, en la pérdida de tiempo y el despilfarro de recursos que supone enviar a tanta gente para algo de tan poca monta. Es como emplear siete camiones de bomberos y dos aviones contra-incendios para apagar la llama de un mechero. Seguramente, después se irían todos a comer a costa del contribuyente. Si hay algún lector de este blog  de Torrijo, que lo investigue y  nos lo cuente.

Evaristo Torres Olivas

Lean las tontadas que cuenta

 la gente del PAR, especialmente Julio Esteban