“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

lunes, 12 de noviembre de 2012

Quien parte y reparte...

No me gusta nada José Bono. Varias columnas en este blog avalan esta afirmación. Ahora el hombre va recorriendo España –o Ejpaña como a él le gusta decir—promocionando sus memorias por las que ha cobrado un pastón de la editorial. La palabra que mejor lo define, en mi opinión, sería la de político populachero. Político populachero con un jetón que se lo pisa. Hace afirmaciones para quedar bien ante la gente pero después no hace nada para  cumplirlas y es el primero en beneficiarse del incumplimiento. Ya en 2010 declaró, con respecto a la forma de elegir a los candidatos de las listas electorales, que  “te ponen en la lista y si estás en buen sitio, sales”. Ahora, dos años después, en una entrevista en el Heraldo de Aragón del 8 de noviembre,  prosigue con la misma tesis y afirma que “lo que deberíamos es derogar una ley que permite elegir a los partidos pero apenas a las personas. La ley electoral sirvió, pero ya no sirve. Si usted quiere ser diputado, es más útil hacerse amigo de quien hace las listas que de quien las vota”. Bono es tan cínico como Urquizu, de quien hablé en la anterior columna. Parece que el cinismo es una característica de los socialistas obreros españoles: predican una cosa y hacen la contraria.  Si en el caso del don Ignacio, daba su juventud y bisoñez, cabía la duda de si era ingenuo o cínico, cuando hablamos de Bono no hay ninguna duda: don José es perro viejo, pulido por los jesuitas y acostumbrado a torear en todo tipo de plazas y a enfrentarse con “los de los partidos propios [que] son unos hijos de puta”, según dijo con motivo de la polémica de la placa de homenaje a la monja sor Maravilla de Jesús.  Si Bono dice esas cosas de las listas y de hacerse amigo de quien las hace, habrá que creerle: don José lleva más de 40 años como socio del club PSOE y sabe lo que se cuece. Aunque, pensándolo bien, tampoco hay que ser del PSOE ni tener mucha experiencia para darse cuenta de que Velasco, Guillén, Arrufat, Mayte y Larred son muy amigos de quien hace las listas. Aparecen siempre en buen sitio y salen. Algunos, como la señora Pérez, en más de una lista. Por si acaso. Incluso puede pasar que no sean amigos de quien hace las listas sino que las listas las hacen ellos mismos y será ese el motivo por el que quien parte y reparte se queda con la mejor parte.

Evaristo Torres Olivas

Tanto los de la imagen superior como los de la inferior, son siempre los mismos

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Te has dejado a Miguel Angel Lafuente.

Eto dijo...

En la columna hablo de PSOE; Miguel Ángel Lafuente es del PP. En ese partido pasa exactamente lo mismo: quienes hacen las listas se quedan con la mejor parte: Blasco, Pobo, Lafuente, etc.

Anónimo dijo...

Y te has dejado al que más morro le echa...