“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

jueves, 9 de febrero de 2012

Progreso

Dos noticias en dos periódicos me han hecho pensar de nuevo en lo malos que somos a veces los humanos en general y en lo despreciables que son algunos humanos en particular. La primera noticia, publicada en el Heraldo de Aragón del 4 de febrero, nos cuenta la celebración de una tradición, La Máscara, que se celebra estos días en Ateca, Zaragoza. La Máscara, a la que también llaman robachorizos y “engulema”, es un personaje al que disfrazan de bufón y al que los chavales emprenden a manzanazos. Las manzanas las regalan los empresarios de la fruta, muy abundante en esa zona. Se trata de una tradición de muchos siglos y el alcalde nos cuenta que ahora se tiran manzanas pero hace años eran piedras, con lo que se demuestra, dice, el progreso de la humanidad. El progreso consiste pues en pasar, después de varios siglos, décadas, quinquenios y trienios, de los zaborrazos a los manzanazos. El ataque, por lo visto, se produce después de la procesión para honrar a san Blas. Las bonitas tradiciones españolas: las procesiones, apedreamiento y lapidación de personas, animales y cosas. La segunda noticia no tiene el tono festivo del robachorizos de Ateca. Leo en Público que la viceconsejera de Sanidad del Gobierno de doña Espe se ha hecho la siguiente pregunta-reflexión, en voz alta, en un acto público: “¿Tiene sentido que un enfermo crónico viva gratis del sistema?". No, claro que no, doña Patricia Flores (que así se llama la sujeta): quien quiera ser enfermo crónico que se lo pague de su bolsillo o que se muera. Si se hubiera cuidado, si no hubiera abusado de la bebida, la comida y la mala vida, ahora no sería crónico. Él o ella se lo ha buscado. Y ahora que no pretendan joder y esquilmar al sistema. Si esas cosas se dicen en una conversación de bar (se dicen esas barbaridades y otras peores) no tiene mayor importancia. Pero que lo diga una política con responsabilidades de gobierno, acojona. Decir que el hombre (y la mujer) es un lobo (y una loba) para el hombre (y para la mujer) sería insultar a los lobos (y a las lobas). Tantos años de progreso y lo máximo que hemos conseguido es pasar de las pedradas a los manzanazos. O a las reflexiones profundas de doña Patricia Flores.

Evaristo Torres Olivas

2 comentarios:

Anónimo dijo...

A base de pequeñas cucharadas el PP nos va a llevar al desmantelamiento de la sanidad pública. Y si no le da tiempo en 4 u 8 años, el Psoe rematará la faena.

Somos corderos, y nos llevan al matadero cuando y como quieren.

Anónimo dijo...

¡La madre que la parió!(a la sujeta).Sin más comentarios...