Por si había alguna duda de la solidez de los cimientos sobre los que se sustentan las ideas políticas de Vicente Guillén, intentaré una vez más aclararlo para los lectores de esta página. Hace nada, en noviembre, cuando las elecciones, Vicente Guillén escribía en su blog, Ahora Teruel, una de sus peroratas. Don Vicente sólo escribe en el blog si hay elecciones y hay que comerle el tarro a la gente. Cuando han pasado las elecciones y se ha asegurado la manduca para otros cuatro años, el señor Guillén pasa olímpicamente de escribir una sola línea. En esa entrada del 26 de noviembre, decía: “Me sorprende mucho más que algunos compañeros, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid se lancen, el día después de las elecciones, a pedir responsabilidades unos, a pedir primarias a la francesa otros, a abogar por más participación en un partido que si algo tiene es ámbitos de participación, al menos en aquellas federaciones que funcionan con normalidad”. Han bastado dos meses y un Congreso en Sevilla para que el día 7 de febrero, el Diario de Teruel recogiera éstas otras palabras de Vicente Guillén: “Ahora se abre un proceso para abrir más todavía el partido a la sociedad, con iniciativas como la elección del candidato a presidente del Gobierno siguiendo el modelo francés y otras que se irán concretando”. El modelo francés no era bueno en noviembre y sí lo es en febrero. Pero eso no es todo: Guillén, responsable de quitarse de encima a Callejero, ganador de las elecciones locales de Alcañiz, afirma: “Somos el partido que más y mejor practica la democracia interna con una elección transparente y democrática, que es un modelo para otras fuerzas políticas que utilizan el dedazo y no nuestro procedimiento democrático”. Si a don Vicente Guillén le piden explicaciones por estas contradicciones seguro que nos contesta como Marx, Groucho: “estos son mis principios: si no le gustan, tengo otros”. De ahí que cuando le preguntan si va a presentarse a la reelección y manifiesta que ya “decidiré si continúo o no”, sus palabras no sean muy de fiar. Si me preguntaran a mí, diría que a Vicente Guillén no lo mueve de la poltrona del PSOE de Teruel ni un terremoto de magnitud 8 en la escala de Richter o de grado XI en la de Mercalli.
Evaristo Torres Olivas
Esto dice ahora y si pulsan en el enlace siguiente, leerán lo que decía en noviembre
2 comentarios:
Cómo me gustaría ver publicado este artículo en el Diario de Teruel.
Lo de este hombre no tiene nombre.
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