“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

martes, 14 de febrero de 2012

Los iluminados

Y luego dicen que criticamos a los políticos. Hoy no me voy a referir a los corruptos,  los que meten la mano en la caja y los que trincan comisiones. Hoy hablaré de una noticia que publicó el Diario de Teruel el martes, 7 de febrero. Con este titular: “El PSOE de Calamocha denuncia el engaño del PAR con la empresa de luminarias de led”. El concejal del PSOE de esa localidad, Manuel Rando, denuncia que el anuncio del alcalde de que se iba a instalar en la localidad una empresa que crearía 120 puestos de trabajo, “fue un montaje electoral para aprovecharse del paro creado en el municipio por el cierre del matadero Pelbor”. Desconozco cuál es la verdad. Si es cierta la acusación del concejal Rando, la actuación del alcalde del PAR merecería que los habitantes de Calamocha no volvieran a votar a esa persona ni a ese partido en toda la vida. Y no dirigirle la palabra a un sujeto que es capaz de aprovecharse de las desgracias de la gente para recoger unos cochinos votos. Merece el desprecio y, si fuera posible, el destierro a una isla solitaria sin cocoteros ni agua, rodeada de tiburones con los dientes como puñales. Pero si es mentira, si el señor Rando falta a la verdad, sería a él y a su partido a los que habría que enviar a la isla sin árboles y sin agua. La degradación de la política y de los políticos ha alcanzado en España niveles más bajos que las temperaturas de este invierno. Una cosa es la confrontación de ideas y las discusiones políticas y otra el todo vale, generar falsas expectativas, jugar con los sentimientos y las necesidades de los ciudadanos. Sé que al final de toda esta historia no pasará nada, se olvidará el asunto hasta la próxima escaramuza en la que los partidos, con tal de permanecer en el poder, son capaces de vender a su padre, a su madre y hasta la memoria de la abuela. De toda esta historia lo que está claro es la afición que le tiene el PAR a las luminarias led. Si hace unos años, don José Angel, el que muele gordo y también el clavico del abanico, fundió dos millones de euros, no de su bolsillo sino del nuestro, en bombillicas del Torico que nunca han furrulado, ahora sus discípulos en Calamocha siguen con las lucecicas de los cojones. ¿Serán todos unos iluminados?

Evaristo Torres Olivas

¿Podríamos considerar al PAR como la casita de las bolas?
(bola: mentira, rumor falso o infundio, generalmente con fines políticos o de otro género)

Las lucecicas del Torico son como los pimientos de Padrón: unas furrulan y otras, non

“ Las luces de la Plaza han superado con nota la Vaquilla, el Mundial y el toro ensogado”
(declaraciones de don José Ángel Biel en un acto de la Fundación Amantes, el martes 13 de julio de 2010. Se trata de las palabras de un profeta, un visionario adelantado a su tiempo. Desde aquí propongo que se le erija a don José Ángel, por suscripción popular, una estatua en algún cerro de la provincia de Teruel, como las que hay de los presidentes de los EE.UU. en el Monte Rushmore de Dakota del Sur).

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