Ser de izquierdas es desarrollar políticas y aprobar leyes que eliminen la corrupción para que no haya más Gürtel, ni Filesa ni Gal. Es tener un sistema educativo de calidad en el que el fracaso escolar sea mínimo. Ser de izquierdas es cambiar la legislación laboral para que no haya nadie con contratos basura, ni mileuristas ni despidos por cuatro chavos. Ser de izquierdas es mejorar la productividad invirtiendo en tecnología, en formación y en incentivos a los trabajadores en forma de participación en beneficios. Ser de izquierdas es establecer un sistema impositivo en el que los que más tienen paguen más, eliminando los privilegios fiscales y los chanchullos para evadir impuestos. Ser de izquierdas es perseguir el dinero negro y el trabajo clandestino. Ser de izquierdas no es criticar a la Iglesia con palabritas y financiarla con euritos. Ser de izquierdas es elegir a los más capacitados, los mejor formados para desempeñar los puestos de responsabilidad en el partido, en las instituciones y en el gobierno, para que no se necesiten mil asesores que enmascararen la burricie y la incompetencia. Ser de izquierdas es hacer que las instituciones sean transparentes como el agua cristalina. Ser de izquierdas es hablarle claro a la gente, desterrando para siempre el lenguaje ampuloso, hipócrita, críptico y falso. Ser de izquierdas es no utilizar un lenguaje progresista y poner en marcha políticas de derechas. Ser de izquierdas es no hacer del líder un caudillo. Ser de izquierdas no es proponer viviendas de treinta metros y vivir en una de cuatrocientos. Ser de izquierdas es predicar con el ejemplo y no recomendar a los demás que utilicen los transportes públicos mientras uno se desplaza a todas partes en cochazos de ricos con chófer y secretario. Ser de izquierdas es ir a los pueblos para hablar con los ciudadanos y no llegar en comitiva, cortar la cinta, simular plantar un árbol, hacerse la foto y largarse al mejor restaurante de la ciudad a zamparse los solomillos y el vino de Somontano con los de tu cuerda pagado con el dinero de los contribuyentes. Todo lo demás es farfolla, hojarasca, cuento chino, desfachatez, cinismo, tomadura de pelo, engaño, embaucamiento, fullería.
Evaristo Torres Olivas. Villarquemado
Enviado DdT 30/9/2009
Evaristo Torres Olivas. Villarquemado
Enviado DdT 30/9/2009
2 comentarios:
Comulgo, comparto, defiendo y lo veo bien sencillo. Es así.
No es sencillo se tan claro y decir cosas tan ciertas y transparentes con palabras tan poco recocoleadas. Tú lo haces parecer sencillo.
JCarlos Navarro
Te seguimos leyendo.
Hola. Muy bueno el artículo.
No me extraña que no te lo publicaran.
A ver si ahora que se puede leer, algún político lo interioriza, independientemente de su color.
Y además me he llevado una sorpresa, pues no sabía que soy de izquierdas.
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