¡Eh, toro!

Ven, toro de mierda, ven, que nos está mirando el pueblo entero y les voy a demostrar a todos los huevos que tengo. Voy a ser el rey de las fiestas. Las pibas se me van a acercar como moscas, porque soy el más macho y a las tías les gustan los tíos con dos cojones, como yo. Y los colegas de la peña me van a respetar, voy a ser el puto amo. Ven, hijo de puta, maricón, demuestra que tus cuernos, tus quinientos kilos de peso y tu bravura pueden con mi inteligencia y mi valor. Mira, cabrón, me pongo de rodillas para que me vea mi vecina. Estas fiestas voy a triunfar, pringao. Se hablará de mí. Los tíos me invitarán a cubatas y las tías se me rifarán. No te tengo miedo. Yo mismo te he bajado del camión y he encendido la brea de tus cuernos. Venga, no defraudemos a la basca que nos está mirando, que son las fiestas, coño, y la gente quiere emociones fuertes. Ven, cabeza hueca, negro de mierda, cornudo. Atrévete. Ponme a mil, comeflores. Todos los ojos están pendientes de lo que yo haga. Y no los voy a defraudar. Arráncate, tonto de los cojones, demuestra que tienes lo que hay que tener. ¡Eh, toro! Escucha como me anima la gente, mi gente, los amantes de las tradiciones y de la cultura de este pueblo. Una cultura y unas tradiciones que se heredan de padres a hijos. Nuestra identidad. Los que aquí están han dejado sus quehaceres sólo para venir a vernos. Demuestra que es verdad lo que dicen de ti, que en las fiestas del pueblo vecino te llevaste a siete por delante. Haz honor a tu raza. Lucha de poder a poder. Haz que suban tu cotización y tu fama, para que tu ganadero pueda lucirte en los carteles. Gánate el pienso que te comes, mamón. Haz que la gente se apasione y se emocione, que para eso han venido. ¡Eh, toro! Demuestra que eres un proyectil de sombras. Excítame y excítate. Ven, bestia de fuego, antorcha móvil. No tienes cojones, morlaco. Eres una vaquita mansa. ¡Eh, toro! No nos jodas la fiestas, cabestro, que unas fiestas sin toro embolado no son fiestas. Que el PP y el PSOE acaban de aprobar en el Senado que nuestras fiestas sigan siendo catalogadas como de interés turístico, nacional o internacional. ¡Eh, toro!
Evaristo Torres Olivas. Villarquemado

Enviado DdT 24/9/2009 NO PUBLICADO