Dúplica o contrarréplica

Aunque no me nombra, es evidente que la carta de doña Rocío Feliz de Vargas, publicada en este Diario el pasado lunes, es la contestación a la que escribí yo unos días antes. Parece que no se enteró mucho del contenido de mi carta. Vuelve a incurrir en el mismo error que durante la campaña. Y además se atribuye el título de augur. Pues sigan por ese camino, usted y los suyos de Teruel. Obtienen unos resultados desastrosos en la provincia, jugando con la ventaja del as de Pizarro en la manga, y siguen diciendo que “al PP no le ha rebotado nada en las narices, sino más bien todo lo contrario”. Por no darse cuenta, ni se entera que al escribir esa frase final, me da la razón, pues lo contrario de que no les ha rebotado nada es que les ha rebotado todo. Pues hala, ustedes erre que erre, a lo suyo, que es perder. No sé a qué se dedica usted profesionalmente pero a la economía no, seguro. Se limita a soltar la misma retahíla de siempre, ladrillo, inflación, trasvase, Zapatero tonto. Dejen de utilizar el copiar y pegar de las consignas del partido. No tiren piedras al tejado del otro que les devolverán los “zaborrazos. Ciertamente la imagen de Zapatero en Bucarest no era para alegrarse, pero desde luego era cien veces mejor que la de Aznar con las patas encima de mesa en el rancho tejano de Bush. O pronunciando una conferencia en Georgetown que daba vergüenza, tratándose de un ex presidente de nuestro país. Si ser amigo de Bush sirve para contar trolas como bolas, es mejor que se hubiera quedado solo “del salón y en el ángulo oscuro, silencioso y cubierto de polvo”. Si usted cree que siguen teniendo la razón y que los equivocados son los miles de turolenses que no les votaron, sigan por ese camino. Yo creo que cuando se pierden unas elecciones, la culpa no es de los votantes sino de los partidos que no han sabido conectar con la gente. Pero yo estoy equivocado y usted tiene la razón. Y Pizarro al gallinero del Congreso. El número dos.
Evaristo Torres Olivas. Villarquemado