Hay comportamientos de algunos de nuestros políticos que dan asco, mucho asco. Les gusta la provocación, buscar pelea, montar un pollo. Y además lo hacen con malas artes, con malos argumentos. Es el caso de Emma Buj, alcaldesa de Teruel y de los miembros de su equipo en el Ayuntamiento. Hace unos días, Ganar Teruel hizo una petición para que no se ofrecieran actos de promoción taurina en un Ayuntamiento. Algo razonable, con lo que se puede estar de acuerdo o no. Yo mismo escribí una columna sobre el tema hace unos días. La respuesta del Ayuntamiento ha consistido en enviar al Diario de Teruel una foto en la que se ve el salón de plenos con todas las sillas ocupadas y algunas personas de pie. El titular: Lleno total en el salón de plenos de Teruel por una charla taurina. Hay alguna mujer, pero la mayoría son hombres. Hombres que cumplieron veinte años hace varias décadas. Y con eso, la alcaldesa y los concejales del PP pretenden demostrar que quienes se quejaron están equivocados. La crítica de Ganar Teruel no estaba dirigida a la charla taurina, sino que, al tratarse de un asunto polémico en el que la opinión pública está dividida, no era razonable que se celebrase en el Ayuntamiento. Si se hubieran celebrado en otro local habrían ido las mismas personas o tal vez más, porque seguramente hay personas a las que les gustan los toros, pero no que se hable de ellos en un consistorio. Yo estoy convencido de que, si se celebrara una charla en el mismo salón de plenos sobre la crueldad de las corridas, el número de asistentes también llenaría el local. Como dato complementario, diré que mi columna en la que hablé de este asunto es la que más visitas ha recibido en mucho tiempo— 450 cuando la media no llega a las 200— y cinco veces más me gusta y comentarios que el resto de publicaciones. Y en esa columna digo lo mismo que cuento aquí: que un ayuntamiento no debe buscar la provocación ni encender los ánimos de los ciudadanos con temas en los que las posturas están muy encontradas, como son los toros y la religión. Los políticos deben buscar la convivencia en lugar de echar leña al fuego para enojar a los ciudadanos innecesariamente.
Evaristo Torres Olivas
1 comentario:
Estas actitudes lo que vienen a demostrar es: "veis como en el salón del ayuntamiento hacemos y deshacemos como nos da la gana".
Esa es la actitud y el motivo oculto de muchas y muchos gobernantes: dejar claro con sus acciones que tienen la sartén por el mango y lo que piense la gente sin poder, a la que desprecian, les trae sin cuidado. De hecho, hay actuaciones cuyo único fin es ese.
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