El zorro

Escuché a José Angel Biel en la entrevista de Aragón TV del pasado 12 de septiembre. De nuevo el mismo sistema que se empleó con Rajoy: el entrevistado y cinco periodistas amaestrados. Cada periodista hace una pregunta y el entrevistado contesta lo que le da la gana sin que el periodista pueda intervenir porque invadiría el espacio que le corresponde al siguiente. No se establece ninguna dialéctica, ningún diálogo sino solo preguntas y respuestas sin posibilidad de réplica. Y en esa situación Biel, que lleva 30 años viviendo del cuento de la política, se mueve con mucha soltura. Nada dijo sino las mismas obviedades que lleva contando toda la vida. Es mucha la habilidad que tiene este señor para desentenderse de todo y para hablar mucho rato sin decir nada. Ni él ni su partido tienen nada que ver en la crisis sino que es gracias a su partido, el PAR, que Aragón está mejor que otras comunidades. No hay que cambiar nada, ni reducir administraciones ni nada; como mucho, racionalizar con una ley las competencias de cada una. Vamos, que según dijo Biel, en los últimos treinta años, que son los que él lleva en política, Aragón no había tenido tantas oportunidades desde los Decretos de Nueva Planta. Eso dijo. A mí no me sorprendió la actuación de Biel, un viejo zorro de la política, que ha sabido mantenerse en primera línea durante muchas legislaturas. Esa hazaña no está al alcance de cualquiera. Se precisan unas cualidades especiales, excepcionales que muy pocas personas poseen. Desgraciadamente, esas cualidades, que sirven para vivir cómodamente de la política, no son las que necesita Aragón o España para prosperar. En ese terreno, en el de dar soluciones a los problemas de Aragón, don José Ángel no aportó ni una sola idea concreta. Dijo que para disminuir el paro era necesario que los políticos ayudasen a los empresarios a crear empleo. Claro, eso es como decir que para llegar a la cima de la montaña hay que escalar, o que para llegar a la meta hay que avanzar. Soluciones para acabar con la crisis no aportó ninguna pero no por ello don José Ángel dejó de hacernos sonreír con su sentido del humor. El inventor de expresiones tan afortunadas como moler gordo y clavico del abanico, en esta ocasión nos dijo que de no ser por el Estatuto que él y su partido tanto han defendido, en estos momentos “Aragón seríamos tres: Zaragoza, Huesca y Teruel”.

Evaristo Torres Olivas