Cuando uno se pone a escribir una columna de opinión, si no quiere hacer el ridículo o exponerse a que lo demanden por difamador, debe documentarse rebuscando en los periódicos, en los libros o en el Internet, para asegurarse de que las afirmaciones que hace y las frases que pone en boca de otros son ciertas. La labor de documentarse consume casi siempre mucho más tiempo que la escritura del artículo. Por eso se agradece cuando te lo ponen a huevo todo junto. Esto sucedió el sábado 20 de marzo. En una misma sección, la de Opinión del Diario de Teruel, tres “eminencias” políticas de nuestra provincia, una detrás de otra, nos explican cómo funciona el mundo y que las cosas buenas son como son gracias a sus partidos. Lo jodido del asunto es que pertenecen a partidos diferentes. Por pura lógica, dos de ellos mienten. O mienten los tres. Benito Ros Corella, del PAR, nos cuenta que todo lo bueno de Teruel en los últimos años es obra de ese genio llamado José Ángel Biel. Don Benito, se acaba de ganar la continuidad en el puesto para los próximos años. Por pelotas. Santiago Lanzuela, diputado del PP, tampoco se anda con falsas modestias a la hora de ponerse medallas. Cuando los socialistas y el PAR se descojonaban con el proyecto Dinópolis, ahí estaban los peperos con don Santiago al frente, dando ese pequeño paso para el hombre pero gran paso para Teruel. Y ahora viene Arrufat, un socialista que en el pasado se mofaba del proyecto, y se deshace en elogios. Eso no se hace, don Antonio. Dejo para el final la joya de la corona: doña Yolanda Casaus hablando de impuestos. La diputada socialista, nos larga un refrito sobre los impuestos que, siendo generosos, podría obtener una calificación de cero pelotero en un examen de un curso básico de Derecho fiscal y tributario o de Hacienda pública. Se necesita mucha ignorancia o mucho atrevimiento, o las dos cosas, para lanzarse a la arena a lidiar un toro tan grande, sin ninguna preparación ni conocimientos sobre el tema. Tres ejemplos de propaganda—que no de opinión--. Y los tres en una misma página. Hay días en que escribir una columna dura menos de cinco minutos. Te lo ponen a huevo.
Evaristo Torres Olivas. Villarquemado
DdT 26/3/2010
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2 comentarios:
Genial, don Evaristo. Lástima que en la página de al lado le haya puesto otro texto de un clásico de la sección propagandística del Diario, el señor Espada Giner. Ya ve, hacen "algo a la vez". Se necesitan más voces críticas e independientes ahora, sobre todo cuando abunda la propaganda y el autobombo. Enhorabuena
¡Qué pena penita pena me dan los políticos caras y encima atrevidos!
Yo, ya es que ni puedo terminar los artículos de muchos de ellos, y mira que lo intento.
Evaristo das en la diana, una vez más, y dejas claro lo evidente.
Me gustan los escribidores que dejan en la intemperie las imposturas y a tantos impostores.
Gracias.
ARB
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