“Periodismo es difundir aquello que alguien no quiere que se sepa, el resto
es propaganda. Su función es poner a la vista lo que está oculto, dar testimonio
y, por lo tanto, molestar. Tiene fuentes, pero no amigos. Lo que los periodistas
pueden ejercer, y a través de ellos la sociedad, es el mero derecho al pataleo,
lo más equitativa y documentadamente posible. Criticar todo y a todos. Echar sal
en la herida y guijarros en el zapato. Ver y decir el lado malo de cada cosa,
que del lado bueno se encarga la oficina de prensa”
-Horacio Verbitsky,
periodista y escritor argentino

viernes, 25 de noviembre de 2011

Sardineta y cacahuetes

Una simple frase de don Marcelino Iglesias me ha hecho pensar en la catadura (¿o se dice caradura?) ética, moral o como se llame el cuajo y la pachorra  de algunos políticos. En una conferencia de prensa celebrada tras el batacazo del PSOE en las elecciones, le preguntan a don Marcelino sobre unas afirmaciones de Rubalcaba en el mitin de Zaragoza, y  contesta, sin que le tiemble la voz ni sonrojarse, que "en los mítines se dicen muchas cosas".  Dicho en lenguaje de Villarquemado: los mítines son unas “farzas” en las que un “farceros” nos cuentan tontadas. Detrás de esas palabras de Iglesias se esconde el pensamiento de muchos políticos, a saber: que el pueblo es un hatajo de imbéciles a los que se puede engañar de cualquier manera.  Las promesas electorales son peor que los cacahuetes de los monos o la sardineta de las focas.  Los monos y las focas dan saltos o hacen equilibrios con una pelota a cambio de algo sólido, pero a los electores nos quieren hacer depositar el voto en las urnas a cambio de promesas: sardinetas y cacahuetes de mentira. Todas las caravanas electorales, las banderas,  llenar las plazas de toros, los velódromos, el “huevo” de Zaragoza, los quinientos autobuses en Dos Hermanas, los debates cara a cara de Rajoy y Rubalcaba, los videos, la propaganda electoral en farolas, el machaqueo diario en radios y televisión con las cuñas de los partidos, todo eso es una puta engañifa, tratar a los ciudadanos y ciudadanas como a monos y focas o focos y monas. En un editorial durísimo, el periódico amigo del PSOE, El País,  habla de la “incompetencia de ZP” y  le pide que se marche cuanto antes, “su familia y su casa de León lo esperan para disfrutar de un descanso bien ganado”.  Yo le pediría lo mismo a don Marcelino, que se vaya a su casa, la Ponderosa de Bonansa, a descansar. Y a Guillén y su Ejecutiva. Para que, como dice el editorial de El País, se “permita a  los socialistas reordenar su casa antes de que los vendavales de este invierno degeneren en tornado”.

Evaristo Torres Olivas

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Hombre, si se van todos los que deben, a lo mejor tienen que disolver el partido...

Enrique García dijo...

Interesante y divertidos tus escritos. Para que veas que te leo. Atajo es más corto sin h.

Eto dijo...

Efectivamente, atajo es un camino más corto, pero cuando se habla de borregos y de ovejas, yo prefiero hato y hatajo. Le noto a usted un pelín mosqueado, pero me alegro de que en su blog haya corregido los vandalismos, que a diferencia de los hatajos, no admiten las dos grafías. Y gracias por leer mis escritos.

Anónimo dijo...

Zasss, en toda la boca Evaristo, sí señor !! A lo mejor a este señor le molestan mucho tus críticas a los SOCIA-LISTOS.
Un saludo

Anónimo dijo...

He pinchado en "Enríque García" para ver su blog y lo primero que veo es una falta: queriendo decir esotérico, escribe exotérico. Y es la segunda, pues desconoce la palabra "hatajo". No estoy seguro, pero parece que es profesor de psicopedagogía..., entre sus faltas y las extrañas conclusiones sobre la teoría de las ventanas, la falta de valores universales, lo que puede pasar si no arreglas algo roto y cosas similares, me ha entrado cierta preocupación por la educación de las nuevas generaciones!

Sobre Marcelino qué decir, experto en cañerías, astuto y montañés, ... yo creo que ocupará el sitio de Blanco, seguro que le ha cogido el gusto a Madrid!